Fue aprobado el jueves 13 de Abril en la Cámara Alta por 48 votos a favor y 9 en contra la iniciativa de Alcohol Cero al volante y ahora Argentina tiene una ley nacional que impide totalmente tener alcohol en sangre al conducir un vehículo en rutas nacionales (no aplica en caminos provinciales).

Si bien la aprobación afortunadamente se logró, es curioso cómo se buscó rechazarla con el ridículo argumento de que conspiraba con las fuentes de trabajo en las provincias con fuerte produccion vitivinícola.

El límite de 0,5 gramos de alcohol en sangre que estaba vigente -y así seguirá en rutas provinciales- se logra con apenas 200 ml de vino (dos copas).

Es decir que la "pérdida" en las ventas o el consumo se remite a apenas el 25% de una botella, siempre que se trate de un bebedor que decide manejar un vehículo.

Si una persona de unos 80 kg. no maneja o si lo hace luego de 4 horas de haber tomado dos copas de vino no tendrá inconvenientes. Si lo que consumió es fernet el cálculo se complica ya que está bebida tiene más del triple de alcohol.

Votaron en contra del proyecto María del Carmen López Valverde, Rubén Uñac, Roberto Basualdo (San Juan), Alfredo Cornejo y Mariana Juri (Mendoza), Julio Martínez (La Rioja), Alfredo De Angeli (Entre Ríos), Dionisio Scarpin (Santa Fe) y Juan Carlos Romero (Salta).

Diego Giuliano, ministro de Transporte de la Nación, agradeció el apoyo de los legisladores y de los familiares de víctimas. "El alcohol está presente en 1 de cada 4 muertes en siniestros viales, por eso siempre fuimos muy claros: alcohol al volante, cero”, expresó.

“Hoy (por el jueves 13/4) Argentina dio un paso histórico en materia de seguridad vial, que deberemos acompañar con más controles y más compromiso, por eso vamos a estar a disposición de cada provincia y municipio para brindarles los recursos necesarios y trabajar juntos en algo fundamental, que es salvar vidas”, remarcó el director ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Pablo Martínez Carignano.

En la Argentina la siniestralidad vial es la principal causa de muerte en personas menores de 35 años. 

Aunque la legislación vigente en nuestro país prohíbe la venta de alcohol a menores de 18 años, es sabido que hay muchos comercios y bares donde se les vende sin reparo alguno.

Según datos de la SEDRONAR, el 50% de los menores de 14 años ya probó el alcohol y se registran casos de inicio de consumo a partir de los 11 años.

Hasta la sanción de esta ley de alcance federal, 13 provincias y más de 50 ciudades argentinas tenían una normativa de alcohol cero al volante y en las provincias con más tiempo de sancionada esta norma, los resultados de fallecidos por año se redujeron desde un 15,8% (Río Negro) hasta un 37,1% (Jujuy).

En la provincia de Buenos Aires, donde se adoptó Alcohol Cero en Diciembre de 2022, los controles realizados por la Agencia de Seguridad Vial durante enero, registró la mitad de conductores con alcoholemia positiva en las rutas a la Costa, en comparación con el mismo mes de 2021.

Inndientemente de esta ley aprobada, es claro que el alcohol provoca euforia, desinhibición, disminución del sentido del ridículo y de la ansiedad, alteraciones del comportamiento, reducción de la facultad de autocrítica, mala coordinación de los movimientos y alteración de la capacidad perceptiva, o lo que es lo mismo: impulsividad, subestimación de los riesgos y una mayor afectación psicomotriz.