María Delicia Rearte de Giachino, la madre del soldado argentino que murió al intentar parlamentar con el gobernador Rex Hunt y exigirle la rendición el 2 de Abril de 1982 en nuestras Islas Malvinas, había nacido en Buenos Aires en 1923 y en 1938 su familia se radicó en Mendoza. Se casó con Pedro Giachino -empleado del casino provincial- y tuvo seis hijos, uno de ellos el capitán de fragata Pedro Edgardo Giachino.
Desde el secundario, Pedro sintió vocación por el mar e ingresó en la Escuela Naval Militar a donde ingresó a los 15 años y se inclinó por la Infantería de Marina. Su primer destino fue Río Grande (Tierra del Fuego), por lo que pasaba varios meses sin ver a la familia, aunque en permanente contacto.
A las 6 de la mañana del 2 de Abril supieron que habían sido recuperadas las islas Malvinas y que había fallecido un alto oficial, sin imaginar que era Pedro. La noticia llegó al mediodía cuando tocó la puerta el portero del edificio para hablar con el señor Giachino.
Al concluir la guerra le pidieron si podía presidir la Fundación Operación Rosario, destinada a recibir a los combatientes que volvían de Malvinas. Se ocuparon, principalmente, de darles contención y cercanía espiritual.
María Delicia Rearte de Giachino enfrentó la resignación con una fuerte presencia en los actos institucionales de la Armada, donde su palabra era escuchada. Los colegas de armas en actividad y retirados recuerdan su lucidez, su temple y fortaleza frente a los momentos de dificultad.
La madre del héroe -que estaba casado y tenía dos hijas- escribió dos libros ("Cada día un 2 de abril” y “Memoriando”) en los que buscó cosechar las enseñanzas y vivencias de los veteranos de Malvinas, manteniendo firme el recuerdo de la gesta patriótica de 1982.
