Con baile y diversas propuestas, quienes asisten a Puerto Libre, la sede del programa "Juventud Prolongada", en Sebastián Elcano 2340, Martínez, el frío queda en un segundo plano.
"Este es un lugar de esparcimiento donde los abuelos vienen a aprender y hacerse nuevos amigos. Con frío o calor, nuestro objetivo es que estén activos, se diviertan y mejoren su calidad de vida", expresó Marcelo Lertora, regente del predio.
El centro recreativo abrió sus puertas hace más de 30 años y cada vez tiene más adeptos. Personas mayores de 60 años disfrutan de caminatas, clases de folklore, tango y rock, talleres de plástica y pintura, gimnasia adaptada y zumba, juegos y recreación, yoga y estiramiento, tejo, croquet, bochas, entre otras actividades.
El lugar está perfectamente equipado: tiene dos salones de usos múltiples, un quincho climatizado, salón para diferentes talleres, sala de video, playón polideportivo, canchas para hacer deportes, biblioteca, mesas y sillas, y mucho espacio verde.
Sin dejar de bailar, Eduardo Gordo, contó: "Todas las mañanas dejo a mis nietos en la escuela y me vengo para acá a jugar al tejo, al ajedrez y a aprender de todo un poco. La verdad que somos privilegiados".
A su lado, Luis Desia comentó que venía hace seis meses y no podía creer la cantidad de actividades que ofrece el lugar.
Con una sonrisa gigante, Marisu Noya concluyó: "Hace 15 años que vengo, Puerto Libre es mi segundo hogar. Este lugar me devolvió la felicidad, la sonrisa y las ganas de vivir".