"Estamos fortaleciendo la prevención", dijo Scioli haciendo referencia al decreto de creación de lo que dio en llamar "policía local" que en realidad es sólo una nueva dependencia de la misma fuerza que él comanda desde la lejana ciudad de La Plata.

"Le pido al municipio que no demore más en suscribir a la policía local", insistió el gobernador en campaña y rodeado de niños que recibieron globos de campaña, señalando que "hubo proyectos en el Concejo Deliberante para que lo haga", aunque no recordó los innumerables reclamos de muchos municipios para que asumiera la responsabilidad sobre la inseguridad en toda la provincia.

La aparición de este gobernador en campaña recorriendo municipios para presionar la aceptación de un cuerpo más de la policía provincial no hace otra cosa que mostrarlo en una puesta en escena que busca desdibujar su responsabilidad en un problema severo de falta de planificación y de improvisación.

La policía comunal que tanto el intendente de San Isidro, como otros jefes comunales, reclamaba desde hace años implicaba descentralización real, en todos sus aspectos, para una fuerza de cercanía y no sólo una repartición más.

La escasez de formación, la falta de recursos y estrategias, y probablemente de conducción, dejan a la población indefensa.

Naturalmente, como ocurre con otros temas, los municipios reciben las quejas de los vecinos por ser la autoridad más cercana. A los intendentes le reclaman cámaras, patrullaje, seguridad en definitiva, cuando es una fuerza distante, desestructurada, desanimada, y mal encarada desde el poder central provincial la responsable del tema.

Claro está que, aunque los bonaerenses gozáramos de policías bien entrenados, bien equipados, sólidamente dirigidos, bien remunerados y controlados, el problema de la inseguridad no se acabaría, toda vez que la Justicia y el Servicio Penitenciario son parte indiscutible de la tragedia.

Scioli expresó su "admiración y respeto", por quienes "inspirados en la vida y obra del papa Francisco, marcan un camino en el que todos puedan avanzar y que nadie se quede atrás; el camino de la paz, la igualdad de oportunidades, sensibilidad y solidaridad, y esta escuela parroquial es una fiel expresión de ello", subrayó quien impulsa el Móvil de la Muerte que garantizará que se mate al bebé que en hospitales públicos los médicos no quieran abortar.

"Hay que enfrentar al delito con más educación e inclusión, y si alguien sabe de esto es el padre Jorge con su experiencia en las villas de Tigre y aquí en este barrio carenciado, que siempre busca que todos puedan avanzar y progresar”, dijo Scioli en La Cava.

El sacerdote García Cuerva por su parte colaboró con la campaña del gobernador diciendo que sentía "alegría de que el Estado provincial esté cerca en la persona del gobernador Daniel Scioli. Por un lado se organiza este evento para los chicos para estimularlos y alegrarlos en el Día del Niño y por otro lado se da la posibilidad de arreglar concretamente la cocina y el comedor, y de poder contarle la problemática que tiene nuestro barrio que es mucha, y me parece que está bueno que el gobernador la sepa".

[Fuentes: Zona Norte Diario / Propias]