Reunión de Monseñor Oscar Ojea con periodistas locales
Aceptando una cordial invitación de parte del obispo de la diócesis de San Isidro, un grupo de hombres y mujeres de la prensa local participaron este viernes -6 de Junio- de un encuentro en Av. del Libertador 16.199, San Isidro, donde la cordialidad de un sencillo agasajo dejó lugar también a un enriquecedor diálogo sobre la realidad de la diócesis y el rol de los medios de comunicación.
Monseñor Oscar Ojea, luego de leer el mismo mensaje que improvisadamente había brindado en un video por el Día del Periodista, respondió a diversas preguntas de parte del periodismo que ejerce en medios de la zona norte del conurbano.
Inicialmente, y frente a la inminente Colecta Anual de Caritas de este fin de semana, Monseñor Ojea aclaró que la recaudación se divide en tres partes: una para Caritas parroquial, otra para Caritas diocesana y otra para Caritas nacional.
"Nosotros tenemos la colecta este fin de semana en que el Papa (Francisco) se reune con los dos líderes religiosos de Palestina e Israel para orar por la paz. Curiosamente no los ha invitado a dialogar, no a hablar, sino a orar, a rezar al mismo Dios. Y nos ha pedido que a nosotros los católicos hagamos un minuto de oración hoy (viernes 6) a las 13:00. Y ha querido que se haga hoy porque es el comienzo del shabat (día sagrado de la semana judía)", destacó el prelado.
"Los obispos cuando hacemos una reflexión pedimos que se haga un gesto concreto que apoye, que la haga más profunda, la colecta de Caritas es un llamado a la generosidad y a crear condiciones para la paz, es un gesto muy importante que vamos a vivir el fin de semana, donde la generosidad de nuestro pueblo se pone a prueba."
La colecta de Caritas año tras año supera lo recaudado por la participación de la comunidad. "En cada comunidad la colecta es una oportunidad para estrechar vínculos, participan los jóvenes, participan muchos en la promoción. Yo mañana (por el sábado 7) voy a estar en San Fernando, donde estará la gente promoviendo la colecta, en las calles, en la plaza." La tradicional colecta provoca que personas que no frecuentan los templos y otros que no tienen fe aporten recursos para los más necesitados. Una evidencia de la transparencia que todos identifican en Caritas.
"Nosotros estamos preocupados por las nuevas pobrezas", puntualizó monseñor Ojea. "Entendemos por pobrezas esas formas de vida que han adquirido mucha virulencia y que han ido creciendo, sobre todo en los últimos 20 años, y transformando la realidad social. Las adicciones han traido muchísimas dificultades, entre ellas una violencia mayor. Al mismo tiempo diría que la violencia es una forma de pobreza. Nos encontramos también con la trata de personas, que también es consecuencia de lo mismo."
"La forma como se perjudica el medioambiente, que va creciendo gradualmente y también va creando formas nuevas de pobreza. Frente a esto el voluntario de Caritas o aquella persona que está trabajando más cuerpo a cuerpo por los hermanos que más lo necesitan, lo que recibe es sufrimiento, dolor, una historia. No recibe solamente un pedido."
"Por supuesto que hace a la dignidad humana el hecho de estar bien alimentado, tener ropa suficiente, vivir en un habitat donde uno no esté hacinado, y son problemas que subsisten. Pero hay realidad de dolor donde el trabajo de Caritas se transforma más en una contención que en la solución de un problema concreto."
"Una abuela que tiene graves problemas porque el nieto que le roba para consumir (drogas) y lo tiene que expulsar de la casa, ¿a dónde va con su dolor, a quién se lo dice, en quién va a confiar? A la policía no va a ir, a la fiscalía no va a ir. Necesita una comunidad que la pueda contener. Esto es un ejemplo de cómo la pobreza se presenta con un ropaje nuevo, que conlleva muchos deficit al mismo tiempo. Se empiezan a dar muchas cosas juntas que se tocan, unas con otras."
"Entonces se hace necesario un modo de abordaje global que tiene que ver más con un sentido de la vida que con sólo carezco de esto o de esto otro. El problema de la inclusión social tiene que ver con la educación, con la salud, pero para poder encararlos hay hacerlo de un modo global."
Consultado sobre el periodismo y su rol en la sociedad argentina actual, monseñor Ojea señaló que "Es muy importante la actividad periodística para ayudar a reflexionar, para ayudar a pensar hacia adelante, para poder hacer prospectiva en el país. Y muchas circunstancias nos llevan a tener que hablar de lo inmediato, y dentro de lo inmediato a jugar un partido. Esto es River o Boca. Y esto cansa bastante. Es necesario crear oportunidades para desarrollar el pensamiento del pueblo."
"Veo al periodismo en un momento de hacer opciones: '¿Entro en esta dinámica del servicio a la verdad, para hacer pensar, o repito lo mismo?'"
"Me parece importantísimo porque nuestra gente dice 'leo esto y esto no lo leo porque se lo que va a decir'. Y esto me parece complicado para la libertad de pensamiento."
"Tenemos libertad de expresión y tenemos que usarla, tenemos que servir al país en esto. Y me parece que el mejor modo de servir a la verdad es poder desarrollar una reflexión que pueda mirar la patria hacia adelante, qué políticas de Estado podríamos pensar para los futuros años, cómo podemos encarar problemas que son de todos, que no son del Gobierno ni de la Iglesia, sino que son de todos."
Retomando la colecta de Caritas y la situación de la diócesis, el obispo detacó que los puntos más difíciles para sobrellevar tienen que ver con los centros de Caritas, con todo lo que abarca la educación no formal.
"Tenemos 114 obras con mucha gente trabajando en ellas, entregando tiempo, conteniendo a 15.000 niños y jóvenes en contraturnos de colegios (chicos que si no tuvieran esa contención estarían en la calle). Estamos en conversaciones con el gobierno provincial para que el valor de las becas aumente para poder nosotros continuar prestando estos servicios tan importantes para el bien común."
"Trabajamos mucho con las redes, ha sido un aprendizaje importante poder tener formación profesional, un servicio muy útil sobre todo para los adultos. Caritas tiene casi 60 años y ha ido adquiriendo algunos aprendizajes como pasar de la asistencia a la promoción y tener un oído atento a la persona."
Texto del saludo del obispo por el Día del Periodista:
Desde que estoy en San Isidro, hace cuatro años, y de que soy obispo un poquito más que dos, he tenido oportunidad de conocer a los periodistas de nuestra zona porque muchas veces hemos tenido oportunidad de dialogar, de encontrarnos, varias veces he sido entrevistado, muchas me encuentro con las cámaras después de alguna ceremonia o después de algún evento.
A medida que va pasando el tiempo valoro cada vez más esta vocación periodística, esta inquietud interior que hay detrás del corazón de cada periodista para poder desaparecer de algún modo ellos y hacer aparecer aquello que es noticia, aquello que es importante para los demás, aquello que va a prestar hoy, realmente, un servicio, para aclarar, para hacer pensar, para ayudar a reflexionar y muchos de ellos, a través de sus preguntas, me han demostrado que hay preguntas abiertas, hay preguntas que van abriendo caminos, hay preguntas que le dan la oportunidad a uno, que no pertenece al medio, le dan la oportunidad de desarrollar algunas cosas que tiene como dormidas, que tiene como ocultas y que pueden ser importantes para los demás.
Qué notable, yo digo siempre, que en la educación lo fundamental es que la persona pueda descubrir sus capacidades ocultas. Descubrir aquello que tiene dormido y aquello que no ha salido a la luz. Descubrir en la educación lo mejor que tiene y que no ha podido ser desarrollado, no ha podido ser explicitado.
De alguna manera el buen periodismo favorece, a través de las preguntas inteligentes, todo aquello que el entrevistado, buscando la noticia, puede sacar de sí mismo y ponerlo también al servicio del bien común y al servicio de todos los hermanos que necesitan conocer y reflexionar, por supuesto, tener a mano las noticias y estar bien informado.
He descubierto en este tiempo, entonces, que el periodismo es una verdadera vocación, una verdadera inquietud del corazón. Es un servicio sin el cual la democracia, sin el cual la Patria misma, dejaría de estar comunicada, dejaría de tener un lazo de unión fundamental para poder ser nación.
Quería felicitarlos a todos en su día, desearles todo lo mejor, pedir por su trabajo y pedir también por sus familias, por sus chicos y por sus necesidades.
Que Dios los bendiga.
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