San Isidro rezó por el teniente Garrido y reclamó por la seguridad
Nuevamente una multitud de vecinos se dio cita en la Catedral de San Isidro, colmándola al igual que sus inmediaciones.
En esta ocasión, martes 17 de Febrero, fue para rendir un emotivo homenaje a Aldo Roberto Garrido, el policía querido por todos, cruelmente asesinado al tratar de evitar el asalto a un comercio de la calle Chacabuco 361, San Isidro, en mas de una ocasión víctima de idéntico delito.
Durante la celebración eucarística -oficiada por el padre Pedro Oeyen- hubo prolongadas y repetidas salvas de aplausos al servidor del orden caído en cumplimiento de su deber y, en diversas ocasiones, unánimes reclamos de justicia.
La convocatoria fue hecha por la Cámara de Comercio e Industria del partido de San Isidro y, entre la numerosa concurrencia, fundamentalmente vecinos acompañados por sus hijos y comerciantes, estuvo, entre otras autoridades, el intendente municipal, Dr. Gustavo Posse, y el jefe de la Policía de la provincia, comisionado Daniel Salcedo.
Luego del oficio religioso, la multitud permaneció por espacio de varios minutos en el lugar, prorrumpiendo en aplausos en homenaje al teniendo Aldo Garrido, ascendido pos mortem al grado de capitán por el Ministerio de Seguridad bonaerense.
Muchos de los vecinos, hicieron un alto luego en Chacabuco 361, frente al local en que Garrido dejó su vida en acto de servicio. Alrededor de un centenar de ofrendas florales fueron depositadas allí por miembros de la comunidad en su homenaje.
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