Cáritas San Isidro organizó el primer encuentro de todos sus grupos de Apoyo Escolar, con el objetivo de intercambiar experiencias y sumar esfuerzos.
Teniendo en cuenta la realidad social que vive nuestra sociedad e involucrándose directamente con ella para colaborar, Cáritas San Isidro se lanzó a organizar esta reunión de Apoyos Escolares, en la cual participaron cerca de 160 personas que integran 39 centros de apoyos escolares de la diócesis.
El lema de la reunión fue “Cuando uno sueña solo, sólo es un sueño. Cuando muchos sueñan juntos, es el comienzo de una nueva realidad”, nombre inspirado en una frase de Monseñor Helder Camara.
El objetivo fue tener un lugar propio de encuentro donde poder compartir las prácticas educativas, conocerse, aprender de los otros y con el otro, de su trabajo, de sus proyectos y así encontrar una identidad colectiva.
Fabiana Aquino, responsable del área dentro de Cáritas detalló: “Cada Apoyo Escolar tiene mucho camino recorrido, muchas experiencias y aprendizajes que va construyendo de manera individual en su cotidianeidad y en su trabajo con los niños y adolescentes de los centros. Primero se trabajó la multidiversidad de las prácticas de cada centro, el proceso histórico individual, cómo y cuándo surgieron, y respondiendo a qué problemáticas. Luego a qué se dedica cada uno, cómo es su estructura, su organización, su funcionamiento y su sostenimiento”.
En el encuentro contó con la presencia del Padre Ernesto Martínez, quien brindó una reflexión acerca del camino hacia Dios que Jesús abrió para todos nosotros, con el título Humanizar la vida, servir a los hermanos y acoger a los excluidos.
Dijo Martínez: “Cuando las experiencias humanas son tan fuertes, las palabras no alcanzan; esto les sucedió a los discípulos, al poner por escrito la experiencia de conocer a Jesús, recurrieron a imágenes”. Y ejemplificó: “la imagen de “Hijo del hombre”, que vino a humanizar la vida; la imagen de “Siervo de Yahvé”, que viene a servir al hermano y no a ser servido; y la imagen de “Redentor”, que viene a incluir al excluido. Estas imágenes se refieren a este Jesús que acoge a todos y va detrás de los abandonados”.
Muchos fueron los aprendizajes y momentos compartidos. Reflexionaron acerca del encuadre pedagógico, el marco teórico, ideológico y el práctico. Fue una oportunidad de poder compartir y enriquecerse unos de otros, encontrarse, buscar nuevas alternativas para abordar la realidad y colmarse de esperanza al ver tantos logros obtenidos.