Desde hace 16 años, el Comedor Sagrado Corazón del Barrio Santa Ana, de Boulogne, le brinda almuerzo y merienda a más de 150 niños.
A pesar de la buena voluntad de quienes le donan alimentos para “ayudar a ayudar”, hoy en día, atraviesan una etapa de necesidades, que le dificulta, pero no les impide, seguir alimentando a los pequeños de la zona.
Adelaida Rodríguez, es la impulsora de la creación del Comedor Sagrado Corazón, ella comenzó a gestar este gran trabajo comunitario allá por el 2002, cuando siendo catequista del centro misional del barrio, notaba que los niños se quedaban dormidos mientras ella les daba su clase, fue entonces, que preocupada, comenzó a consultar el tema y advirtió que los chicos estaban mal alimentados y por eso no podían mantenerse despiertos.
Acerco de esos trabajosos comienzos del comedor Adelaida nos relató: “empecé a trabajar en mi casa, me ayudaban mis hijos y mi marido, al principio eran 33 chicos, mis alumnos de catecismo, hoy llegamos a los casi 170. Al principio no había mucho lugar y cuando llovía o había mal tiempo no podíamos arreglarnos bien, como mis hijos trabajan en un corralón, amablemente nos fueron donando material y construimos el piso de arriba de mi casa, allí empezamos a tener mas espacio, y a poder recibir a más chicos”.
Al principio solo brindaban merienda a los niños que asistían, los muebles, manteles y otros elementos eran donados por los padres o gente del barrio, incluso fueron las mamás de los chicos las primeras voluntarias, aún hoy lo siguen siendo, y por supuesto el incansable trajo que llevan a cabo, a diario, Adelaida, sus hijos, su esposo y ahora, también sus nueras.
“Nos empezaron a hacer notas y de a poco se fue conociendo nuestro trabajo –rememora esta gran mujer- sobre todo recordamos una de ATC, que hizo que mucha gente se acercara donar alimentos y otras cosas como ropa, zapatillas, carne y verdura, que hoy es un problema porque con todo lo que está pasando no logramos que nos lleguen este tipo de alimentos, también se nos redujo a la mitad la donación de leche, el tema es preocupante, pero a pesar de todo seguimos trabajando”.
La Municipalidad de San Isidro, a través de Acción Social, le brinda mensualmente, a este comedor comunitario, alimentos no perecederos, que hoy por hoy son el gran sustento para que los chicos puedan comer todos los días.
“Al principio –relata la creadora del comedor- eran los chicos que eran mis alumnos de catequesis, después empezaron a venir los hermanitos, los primitos, los vecinos y cada vez la necesidad era mayor, de la merienda pasamos a dar almuerzo y tenemos niños de 2 a 12 años, pero también tenemos chicos de hasta 14, que tienen alguna discapacidad y que sus familias pasan una realidad muy complicada. En nuestro barrio,no solo el problema de la comida como te podrás imaginar, aquí hay una realidad social muy difícil de sobrellevar y nosotros hacemos lo que podemos, que es bastante creo, porque sin esto que les damos, muchos chicos no comerían, porque las familias no tienen medios económicos y todo es cada vez más caro”.
Por estos días, el Comedor Sagrado Corazón, necesita cualquier tipo de donación por las grandes necesidades que atraviesa la población que lo rodea. Comida, sobre todo carne y verdura, ropa, medicamentos, útiles escolares, libros, frazadas, muebles, todo viene bien, todo hace falta porque la situación actual, es dura y el trabajo que hacen, tiene un valioso impacto, en los vecinos del barrio Santa Ana.
Para comunicarse con ellos y si es posible colaborar, llamar al teléfono 4737-6447