San Isidro, Buenos Aires |
14 de Marzo de 2025 | 8:06:39
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VALORES
Balance trágico para miles de argentinos
Como se estila y promueve, la finalización del año es tiempo para evaluaciones.
Los logros, algunos avances, los proyectos que no funcionaron, las pérdidas afectivas, las reconciliaciones, los nuevos desafíos se ponen sobre la mesa. Y aunque se espere que lo bueno haya sido mayoría, con salir "empatados", muchos se sentirán satisfechos.
La cuestión económica en un país desparejo, desigual, oscilante, inseguro desde hace décadas es insoslayable. Sin dudas, es uno de los principales motivos por los que la Argentina expulsó a miles de jóvenes y familias a buscar otras tierras donde los esfuerzos den fruto y alguna previsibilidad.
La inseguridad, la voracidad del Estado que impide avanzar, la transversalidad de la corrupción, han creado un escenario de dolor, sacrificio a cambio de poco y frustración. Miles se emigraron a países donde no comprenden cómo la Argentina con su pasado de prosperidad y sus enormes riquezas naturales, tiene a más de la mitad de su población sumida en la pobreza.
Pero, lamentablemente, también son muchos miles los que no pudieron emigrar yni siquiera pueden entrar en las estadísticas de la pobreza.
Los más de 100.000 niños a los que el Estado en la Argentina les impidió nacer en 2024 y los -por lo menos- otros 100.000 que fueron asesinados en ámbitos privados no serán mencionados en los omnipresentes medios de comunicación (en su mayoría proaborto como sus conductores y periodistas).
Posiblemente tampoco serán consideradas ninguna de las madres de esos niños que, confundidas, adoctrinadas, mal aconsejadas, abusadas, prostituidas, de todo nivel sociocultural, fueron a pedirle aborto al Estado o a la obra social o la prepaga, y se les facilitaron -sin mucho trámite- tanto la muerte de su hijo como los daños emocionales, psicológicos y físicos de tan aberrante práctica.
El actual presidente de la Nación logró el voto de muchos "celestes" que creyeron en sus promesas de campaña de ir contra el aborto. Pero, para que no queden dudas, ya ocupando el sillón presidencial, declaró que la promesa no había existido y que el tema aborto no está en la agenda de su gobierno.
Como es comprobable, mencionar este tema hace que aparezcan velozmente los seguidores del presidente para ladrar, descalificar e insultar al atrevido que ose exigir que, del mismo modo que veta leyes y dispone arbitrariedades jurídicas, pegue cuatro gritos, golpee una mesa y diga en cadena nacional que en la Argentina no se mata a ningún niño por nacer más.
Es verdad que tal acto de coherencia y coraje podría aceitar distintos mecanismos y los pasos legales –a pesar de la clara inconstitucionalidad de la ley genocida- podrían ser arduos y riesgosos. Pero al menos se mostraría que las altisonantes declaraciones fuera y dentro del país tienen su correlato en acciones concretas.
¿Quitar financiamiento al aborto? ¿No comprar ni distribuir insumos para matar niños? Pareció algo bueno para los primeros meses de su mandato, pero sin pasos más firmes como actuar en la promoción de la vida y la contención de mujeres en donde más abortos se hacen, no alcanza.
No se le puede adjudicar a quienes nos gobiernan hoy la responsabilidad por los muchos miles de ciudadanos sin virtudes, sin cultura del trabajo, ventajeros, egoístas, que no se interesan por el prójimo, que carecen de proyectos serios de vida. Un país con niños que acceden fácilmente al alcohol, las drogas y el delito, y demasiados suicidios adolescentes.
En un tiempo sabremos si en 2024 el promedio de 12 niños desechados por hora en la Argentina del provida Milei bajó. ¿Quién se sentiría contento de que "sólo" sean 216 los abortados cada día en lugar de los actuales 288?
Hay miles de mujeres padeciendo las consecuencias emocionales de haber abortado, sin contención afectiva ni psicológica, empujadas a distintas adicciones, a ejercer la violencia, a sufrir en silencio e incluso a suicidarse.
Si en algún momento se reactiva la economía, si la Argentina deja de ser un lugar caro para nativos y extranjeros, si vuelve el crédito, si se recupera algo de los brillos del pasado, si regresan algunos de los que emigraron, será bueno.
Pero si hay quienes aseguran que la Argentina está insinuándose como un faro entre otras naciones, que sea porque tiene gobernantes y legisladores de todo nivel capaces de entristecerse por cada niño que no supieron defender de las garras del aborto. Y que ese dolor interior los empujó enfrentar a políticos e intereses de toda índole para que el vientre materno deje de ser una zona de riesgo mortal.
DATOS:
Abortos en ámbitos estatales de la Argentina desde el 15 de Enero de 2021 73.487 (2021) 96.664 (2022) 106.331 (2023) TOTAL: 276.482
Sobre el promedio del último tramo del 2023, se harían 12 abortos por hora, por lo que la cifra del 2024 llegaría a 105.408.
Total desde la puesta en vigencia de la ley Nº 27.610 (sólo en hospitales y centros de atención primaria administrados por el Estado): 381.890.
Incluyendo los ámbitos privados, el número, por lo menos, es el doble.
El 90% de los abortos se hacen con productos químicos.
Desde Junio de 2023, por una simple resolución ministerial de Salud de la Nación, la llamada peligrosa "píldora del día después" se vende en las farmacias sin receta ni control alguno.
