Naciones Unidas a favor del sexo entre niños y adultos
La Organización de las Naciones Unidas está decidida a promover la despenalización de la pederastia.
Así surge de un documento, titulado como "Principios del 8 de Marzo" -presentado en un evento de la O.N.U. realizado en Suiza el 8 de Marzo de 2023- redactado por el Comité Internacional de Juristas, presidido por Robert Goldman; ONUSIDA, presidida por Winnie Byanyima, y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, presidida por Volker Turk.
Luego de un prólogo firmado por el "orgullosamente gay" Edwin Cameron (Juez jubilado del Tribunal Constitucional de Sudáfrica), se enumeran diversos puntos con el objetivo de presionar por la despenalización de delitos, entre ellos los relacionados con el sexo entre niños y adultos, lo que se asegura que criminalizarlo constituye un "ataquea los derechos humanos".
El documento propone, además, nuevas maneras de interpretar el derecho penal para tener una postura de mayor tolerancia al consumo de drogas, a tener relaciones sexuales con VIH sin informar a la pareja, al aborto como derecho, al anticientífico "género", entre otros.
"El derecho penal es una de las herramientas más duras de que dispone el Estado para ejercer control sobre las personas… como tal, debería ser una medida de último recurso, sin embargo, a nivel mundial, ha habido una tendencia creciente hacia la sobrecriminalización", escribió Ian Seiderman, Director de Derecho y Política de la Corte Internacional de Justicia y quien le puso la firma a este documento.
"En el mundo del VIH, el abuso y mal uso de las leyes penales no sólo afecta al derecho a la salud, sino a multitud de derechos, entre ellos: a no ser discriminado, a la vivienda, a la seguridad de la persona, a la circulación, a la familia, a la intimidad y a la autonomía corporal y, en casos extremos, al propio derecho a la vida", agrega el documento suscripto por dos argentinos, Juan E. Méndez (abogado militante de presos políticos durante el gobierno militar) y Mónica Pinto (abogada y docente proaborto de larga trayectoria internacional).
"En los países donde el trabajo sexual está penalizado, por ejemplo, las trabajadoras del sexo tienen siete veces más probabilidades de vivir con el VIH que en aquellos donde está parcialmente legalizado. Ser criminalizado también puede significar verse privado de la protección de la ley y de la aplicación de la ley. Y, sin embargo, las comunidades criminalizadas, especialmente las mujeres, suelen tener más probabilidades de necesitar la misma protección que se les niega", completa.
¿Qué es el "Principio 16 – conducta sexual consentida"?
Entre los principios enumerados en este documento se da a entender que la Organización de las Naciones Unidas y los demás organismos firmantes proponen despenalizar el sexo entre adultos y niños. El texto pide "promover la libertad sexual, con consentimiento, entre dos personas sin importar la diferencia de edad". Las palabras utilizadas son poco precisas, algo que sin dudas es intencional.
"Sin importar la diferencia de edad", parece indicar que proponen que la pederastia deje de ser un delito, aunque agrega la palabra "con consentimiento". Esto es un punto de debate para la O.N.U., ya que cada país marca la edad de consentimiento de manera diferente.
"La aplicación de la ley no puede estar vinculada al sexo/género de los participantes ni a la edad de consentimiento para contraer matrimonio. En este contexto, la aplicación del derecho penal debe reflejar los derechos y la capacidad de las personas menores de 18 años para tomar decisiones sobre la participación en conductas sexuales consentidas y su derecho a ser escuchadas en los asuntos que les conciernen", dice el informe.
El escrito menciona "menores de 18 años" sin ninguna especificación, es decir, podemos estar hablando de un menor de 16, de 14 o de 10, siempre y cuando exista lo que ellos consideran "consentimiento".
En E.U.A. y en Europa son cada vez más comunes los "Drag Shows", donde un grupo de travestis desfilan con poca ropa en frente del público (que en los últimos años empezaron a incluir niños desfilando y contorneándose) y travestis en escuelas o en encuentros en los que se busca naturalizar esas perversiones. En escuelas se incluyen contenidos que estimulan sexualmente a los niños con la excusa "educarlos".
Los medios de comunicación y distintas producciones dirigidas a niños abundan en material que, desde hace años, busca convencer que hay que tomar por bueno, por opcional, aquello que atenta contra la naturaleza de las cosas.