El día 27 de Septiembre de 2017, cuando se realizó la primera Marcha por la Vida en la Argentina, iniciando una exposición pública de las ya existentes convicciones provida de los ciudadanos del país que frenó la legalización del homicidio prenatal, y favoreció el nacimiento de la Ola Celeste en el mundo,... moría Hugh Hefner, el fundador de la revista "Playboy", que financió el caso Wade vs. Roe empujando la legalización del aborto en ese país.
Rara coincidencia que en la Argentina se iniciara aquel día una etapa en la historia en la defensa de la vida, al tiempo que moría quien costeó una mentira que no sólo legalizó la crueldad de matar niños en EE.UU., sino que desde ese país "se exportó" al mundo esa barbarie pisoteando la soberanía, la decencia y la dignidad de las personas.
Más raro aún que mientras celebramos que han pasado 3 años de aquella primera marcha ciudadana por la vida, estamos expectantes con lo que pasará en los EE.UU. con la propuesta del presidente Donald Trump para que Amy Coney Barrett (abogada de 48 años, católica, casada, con 7 hijos y una trayectoria implecable) se incorpore a la Corte Suprema, en reemplazo de la fallecida Ruth Bader Ginsberg, radical militante del feminismo y del aborto.
El lobby abortista, tan íntimamente ligado al Partido Demócrata, está sumamente preocupado ante la posibilidad de que Trump gane las elecciones y prosiga arruinándole los planes con sus medidas de protección a la vida humana antes de nacer e incluso, que se llegue a revocar el fallo del caso Wade vs. Roe.