Un médico que mata a un delincuente en confusa situación o un carnicero que persigue por las calles y mata a un delincuente, son dos de los casos que se nos han presentado y nos impulsan a opinar.
Livianamente, en redes sociales y en los comentarios de las notas en los diarios on line, la brutalidad asoma en su plenitud alegrándose con el asesinato de un delincuente en cualquier circunstancia.
Comentarios propios de desbordados lectores amparados en el anonimato de un contacto virtual proponer quemar vivos, fusilar y cosas por el estilo.
"Quien se come al canibal se convierte en lo mismo", se dice por ahí. Y es verdad. Algo deberíamos haber aprendido de la historia de la humanidad y de nuestro propio país para desechar el "ojo por ojo y diente por diente".
No hay hecho que justifique tomar venganza o ajusticiar (matar o torturar) a un delincuente, porque no es una acción de personas decentes, confiables u honestas.
Matar o torturar no arregla nada, todo lo contrario. Sólo potencia las posibilidades de que otros delincuentes -ya "jugados" por drogas y alcohol- vayan por mas, sin mirar consecuencias.
Como señala la legislación vigente, salir a perseguir a un delincuente por las calles no es "defensa propia" ni está dentro de las atribuciones de un ciudadano común y corriente.
Y, por más víctima que haya sido en reiteradas ocasiones, nada lo habilita a tomar medidas por el estilo.
Defenderse, buscar evitar una agresión, extremar las medidas de seguridad, reclamar con contundencia, organizar marchas, etc. son, aunque pueda parecer "poco" lo que la ciudadanía puede y debe hacer.
Aunque un funcionario diga que el carnicero es un buen hombre, trabajador y víctima, NO CAMBIA los hechos.
Tolerar que alguien quite la vida a otra persona sin que exista una situación de real y demostrable "Defensa Propia" es un acto de irresponsabilidad.
Desde el ámbito del derecho, tal vez, existan atenuantes que permitan morigerar una pena, pero el Estado no debe amparar con comentarios imprudentes las acciones de violencia y abuso, en ningún caso.