En un salón especialmente preparado para la ocasión en el colegio Santísima Trinidad [Carlos Tejedor 348 , Boulogne] Grávida San Isidro llevó a cabo su encuentro anual para confraternizar entre colaboradores y voluntarios en su misión a favor de la maternidad y de la vida humana desde la concepción.
La responsable de la entidad, Carla Gerbino, fue quien señaló que se trabaja en red con otras instituciones y profesionales, sobre todo porque es cada vez más difícil la tarea de defender la vida y acudir ante un posible aborto.
Grávida ofrece tres tipos de talleres que apuntan al objetivo principal de proteger a las mamás. Como organización que permanece en alerta todos los días del año, acude para asistir a la mujer en riesgo de abortar. "La modalidad quirúrgica nos daba más tiempo. Hoy la mayoría de los abortos son químicos (envían por delivery pastillas abortivas), o sea que cada vez tenemos menos tiempo y la necesidad de armar una red de asistencia nacional es más fuerte. Todos los centros Grávida estamos en contacto para ver quién llega antes a asistir a una mamá que lo necesita."
La entidad busca impedir un aborto sobre la premisa fundamental del respeto por la vida y la libertad. Grávida, con un método distinto de otras organizaciones que buscan el mismo fin (proteger la vida), se propone acompañar, no confrontar, no imponer, no debatir.
Esta forma de trabajo, explicó Carla Gerbino, es la que impulsa la posibilidad de desistir de matar a un hijo. Una mujer que se siente acompañada, comprendida en su situación social, de abuso, de desesperación, puede decidir adecuadamente.
Posteriormente la mamá puede recibir acompañamiento personalizado o mediante talleres de gestación y de crianza, una propuesta que otras organizaciones provida que detectan casos de mujeres en riesgo de aborto no ofrecen, pero que derivan a Grávida.
El otro taller que ofrece Grávida se refiere a la prevención, mediante charlas en colegios y grupos parroquiales.
Las mujeres que son atendidas por Grávida pueden llegar luego de un primer contacto a través del teléfono que atienden las 24 horas los voluntarios, por el boca en boca de personas que conocen la tarea que se realiza, o por el trabajo en red con distintas instituciones y, por supuesto, por la difusión que se hace mediante redes sociales, volantes y el sitio web institucional.
Haciendo referencia a los orígenes de Grávida, Carla relató cómo Juan Martín Reddel, el fundador, vislumbró que, además de la muerte de un ser humano en gestación, el aborto dejaba secuelas graves en la madre. El Papa Juan Pablo II supo de la tarea de Reddel y le propuso extender la labor por la vida desde el Vaticano y para todo el mundo, lo que hizo que el fundador viajara con su familia a Roma y dejara al matrimonio de Diana y Santiago Castillo, actuales directores nacionales de Grávida.
Sobre los profundos daños que deja el aborto en la mujer, el padre Alejandro Rossignolo, vicario parroquial de Nuestra Señora de Aránzazú (San Fernando), señaló que el trabajo de acompañamiento y sanación se realiza con el marco del denominado Proyecto Raquel.
"En este servicio descubrimos un misterio que tiene que ver con el amor, que es la misericordia. Y es desde ese lugar que anunciamos que una mamá que vive en su propia historia una situación de aborto sigue teniendo una esperanza de vida."
"Del Proyecto Raquel participan mamás, papás, abuelos, personas que hayan realizado abortos y cualquiera que se haya visto involucrada en esa práctica, ya que todos llevan heridas por ello." Se trata de 10 encuentros donde las personas van abriendo su corazón al Señor, el único que puede sanar las heridas. Como el aborto está atravesando todos los niveles sociales es bueno que sepamos que este servicio está desarrollándose en la diócesis.
Las primeras personas que participaron de los encuentros de Proyecto Raquel fueron descubiertas por los mismos sacerdotes que, en confesión, recibieron el dolor y las ansias de sanación por haber pasado por el aborto. A ellas fue que se les ofreció participar, inicialmente.
Dardo, uno de los afortunados de los sorteos (la codiciada joya de Testorelli) y pronto a contraer matrimonio con Mónica, otra voluntaria, expresó que por su compromiso con la vida, se sumará a la capacitación del Proyecto Raquel el año próximo para contar con más posibilidades de ayudar.
El encuentro contó la presencia de tres de las voluntarias que participan activamente desde los inicios de Grávida (Mecha, Haydee, Norma) y muchas mujeres que se interesaron en conocer y apoyar la obra de la entidad.
Con la colaboración de jóvenes que oficiaron de camareras y ayudaron en el desarrollo del encuentro, se realizó un sorteo de obsequios y recordatorios que todos celebraron y agradecieron.
Grávida es una asociación sin fines de lucro que atiende y compaña a las embarazadas, mamás y bebés que nos necesiten, especialmente a las adolescentes. Asistir a la embarazada con intención de abortar, para ofrecerle una alternativa diferente de ayuda. Ofrece un espacio de amor, contención y promoción para el desarrollo integral de la mamá.
La sede de la ciudad de San Pedro -diócesis de San Nicolás de los Arroyos-, se ha constituido como sede central diocesana y de coordinación nacional para las diócesis del país.