La Fundación Ph15 que trabaja con jóvenes del Bajo Boulogne y que promueve la educación a través del arte como herramienta que favorece la transformación social, logró un imporante galardón en un concurso internacional organizado por el Banco Mundial, la Organización de los Estados Americanos y el Banco Interamericano de Desarrollo quienes hicieron la Feria del Desarrollo para apoyar a jóvenes emprendedores con ideas que busquen reducir la pobreza y mejorar el nivel de vida.
Premiaron 14 proyectos de América Latina y el Caribe, y 4 son de Argentina. Los ganadores –cada organización se llevó 35 mil dólares– fueron seleccionados entre 44 finalistas de 11 países, previamente elegidos entre 530 participantes.
Todos los proyectos apuntan a reducir la pobreza y mejorar el nivel de vida. Fueron elegidos entre 530 propuestas de América latina y el Caribe. Cada ganador recibió 35 mil dólares que entregó el Banco Mundial y otras entidades. Las cuatro historias y sus protagonistas.
El resto de los representantes argentinos fueron la Asociación Civil Para Que No Te Quedes Afuera, que mediante el fútbol busca atacar el desempleo y devolver a los jóvenes el respeto por las normas sociales y los valores; la Fundación Tzedaká, que promueve la creación de empleo a través de la implementación de una red de empresas que ofrecen oportunidades a jóvenes; y la Asociación Civil Andar, que busca el desarrollo creativo de las personas con discapacidad a través del trabajo, el deporte y la cultura.
Acerca de Ph15
En el camino de la enseñanza a través del arte, un fotógrafo armó un taller escuela de fotografía en medio de la pobreza material. Los talleres brindados por ph15 están destinados a chicos de muy bajos recursos de los barrios de Bajo Boulogne, Ciudad Oculta y Villa 20 de Lugano.
“Me gusta sacar fotos porque es una manera de desahogar lo que me pasa. Si estoy contenta o triste. Puedo expresar lo que siento. También me gusta porque veo la realidad de mi vida y lo que pasa alrededor mío y eso algunas veces es feo. Es feo ver la realidad pero así como hay cosas feas o malas en fotos se puede encontrar lo bueno y lo lindo que pasa en mi barrio y en la vida de cada uno”. La que habla es Samanta Córdoba, tiene 22 años y hace 6 que participa en los talleres de ph15. La Fundación se creó en agosto del 2000, por iniciativa de un grupo de jóvenes de Ciudad Oculta y otro del Bajo Boulogne que querían aprender fotografía. Lo lograron: 500 chicos y adolescentes pasaron por los talleres.
Viven en la Villa 15. También conocida como Ciudad Oculta, está al sudoeste de Buenos Aires, donde viven más de 15.000 personas: el 60% chicos y jóvenes, que conviven cotidianamente con situaciones de violencia y delincuencia agravadas por el consumo de drogas. Las viviendas son precarias y las calles, angostos pasillos de tierra sin veredas. Los servicios públicos sólo llegan hasta la entrada del barrio y la mayoría de los vecinos no tiene agua potable ni electricidad. Pero a través de las fotos los chicos encuentran una nueva herramienta de expresión y de transformación, que les sirve para insertarse a nivel laboral y proyectar emprendimientos propios.
También es un espacio de contención en el que puedan hablar libremente y debatir acerca de sus inquietudes, deseos y necesidades. “Haber ganado el premio es muy importante para continuar con las acciones en Ciudad Oculta. Se podrá acondicionar el centro comunitario. Alumnos y graduados podrán desarrollar allí actividades que les generen un ingreso”, dice Moira Rubio, fotógrafa, y una de las directoras de la ONG. Será un espacio que opere como laboratorio y archivo fotográfico, de formación, de exhibición y difusión de producciones artísticas y culturales no hegemónicas. Informes: 4773-8126, y www.ph15.org.ar