La Colecta en San Isidro ya superó en un 22% al 2006
[2007] -
Según informó Caritas San Isidro a través del área de comunicación del obispado, hasta la fecha, lo recaudado en la Colecta Anual de Cáritas, en la Diócesis –que abarca los partidos de Vicente López, San Isidro, San Fernando y Tigre- superó en un 22% a lo recaudado el año anterior, cuando restan aún contabilizar aportes.
De las 70 parroquias que forman parte de la Diócesis -Vicente López, San Isidro, San Fernando y Tigre-, 55 ya notificaron los aportes recibidos y 15 faltan contestar y de los 71 centros, 34 informaron los resultados y restan aún 37.
Lo recaudado hasta el momento es $ 530.569,55. El año pasado, el número total de la colecta fue de $ 433.910,27. Según la proyección de lo que falta depositar, este año los aportes mostrarían un aumento del 27% con respecto a la colaboración recibida en el 2006.
Caritas sostiene, con estos fondos, diferentes proyectos que promueven el protagonismo personal y comunitario de los pobres en relación con microemprendimientos productivos y de autoconsumo familiares, centros de atención integral, promoción de espacios educativos, autoconstrucción de viviendas, capacitaciones en salud, ciudadanía, oficios y voluntariado, promoción de la salud integral, tareas de prevención, intervención y reconstrucción en emergencias climáticas, trabajo con personas en situación de calle, entre otros.
La colecta se realiza cada año en todas las Caritas de todo el país y ofrece una oportunidad para colaborar con aquellos centros o parroquias que se encuentran más desfavorecidos.
Un testimonio
"No podíamos imaginarnos cuánta repercusión podía tener nuestra acción -dijo Pilar Santillán, una voluntaria de Beccar-, para nuestra sorpresa, y sin que explicáramos en qué consistía la Colecta ni a qué se destinarían los fondos, empezamos a recibir monedas, billetes -chicos y grandes, muy grandes- y hasta agradecimientos. La solidaridad se materializaba rápidamente en todas sus facetas: la de jubilados que apenas tenían para fin de mes, la de pequeños que regalaban sus moneditas y la de otros que donaban mucho. Pero quizás la escena más conmovedora fue la del canillita que vendía sus diarios en la misma esquina. Mientras nosotras lográbamos juntar el dinero solidario, él apenas obtenía resultados, algunas monedas tal vez. Durante 2 horas nos había observado silencioso, y fue cuando nos retirábamos que se acercó y dijo: 'Es poco, pero es lo que tengo'. Y nos entregó sus monedas. Nos fuimos con la convicción de que la Argentina solidaria, la de la gente buena, había triunfado."