El lunes 5 de Agosto el micro de la campaña de CitizenGO que denunciaba en París la ofensa a Dios durante la inauguración de los Juegos Olímpicos y promovía el mensaje StopAttacksOnChristians.org (Dejen de atacar a los cristianos), fue interceptado por policías armados que lo rodearon y detuvieron.
Los miembros del equipo de CitizenGO fueron llevados a una comisaría antes de ser trasladados esposados a una segunda
instalación. Fueron tratados como criminales y a algunos de ellos se les negó incluso la comunicación con el mundo exterior.
La campaña de CitizenGO, apoyada por miles de donantes, fue en protesta contra la ceremonia de apertura anticristiana y promotora del odio en los Juegos Olímpicos de París. Desde los últimos Juegos Olímpicos en 2021, más de 5.000.000 de cristianos han sido desplazados de sus hogares y han enfrentado persecución, sin embargo, el Comité Olímpico Internacional planeó una exhibición ofensiva con drag queens desnudos burlándose de la Última Cena.
El micro había estado activo desde las 9 de la mañana, circulando por París y pasando por delante de cientos de oficiales de policía sin ningún problema. Cuando se dieron cuenta de la inmensa atención que estaba atrayendo entre los transeúntes y los asistentes a los Juegos Olímpicos, temiendo "una mancha" en la imagen de Francia ante el mundo, las élites políticas de repente y de manera viciosa censuraron a CitizenGO, como en un régimen autoritario.
La policía francesa, bajo órdenes de altas autoridades políticas, arrestó a 6 activistas y al conductor del vehículo a las 7 de la tarde. Todas sus pertenencias fueron confiscadas, fueron desnudados y registrados, y se les negó -ilegalmente- llamar a sus abogados. Algunos, incluso, no pudieron llamar a sus familiares, retenidos bajo cargos inexistentes.
Los detenidos enfrentaron presión psicológica y amenazas de una prolongada detención, pasando la noche en condiciones deplorables, algunos sin comida ni agua. A pesar de la falta de fundamentos legales para su arresto, se requirió una presión significativa por parte del abogado de CitizenGO para garantizar su liberación, la que no ocurrió hasta después de las 4 de la mañana.
Este incidente subraya la necesidad de la acción ciudadana en la defensa de la vida, la familia y la libertad contra la persecución política e ideológica. "Unidos, podemos enfrentar tales injusticias y salvaguardar nuestros derechos fundamentales", señalan desde CitizenGo.
La injustificada acción de la policía, que sin dudas, respondió a decisiones políticas, constituye persecución política o ideológica.
Tras la presión del letrado, las autoridades se vieron obligadas a liberar al valiente equipo de CitizenGo después de darse cuenta de que no podían mantenerlos encarcelados sin una razón legal.
"Solos, somos débiles; juntos, somos fuertes. Gracias a nuestra comunidad de ciudadanos empoderados, firmantes y donantes, podemos seguir defendiendo la Vida, la Familia y la Libertad", concluyeron desde la organización.
