¿Por qué no llega la reacción oficial ante los ataques?
En Matagalpa, el obispo diocesano Rolando Álvarez (55) estuvo detenido 16 días junto a sus colaboradores en la sede de la curia episcopal. El obispo celebró misas que fueron transmitida por redes sociales, camino que también usó para llevar mensajes a la comunidad.
En la madrugada de este viernes 19 de Agosto, se informó desde el obispado que Mñor. Álvarez y 8 personas más fueron sacadas de la curia por la policía y trasladados en vehículos con rumbo desconocido en un operativo dirigido por el jefe policial de Matagalpa, Sergio Gutiérrez, y el comisionado general Ramón Avellán, subdirector de la Policía.
Lo que sucede en Nicaragua no es reciente. La relación entre el Estado y la Iglesia Católica ha tenido sus momentos de acuerdo y convivencia, pero lo más constante fueron las acusaciones falsas, las críticas inadecuadas y los ataques de parte del gobierno hacia la fe católica.
Sólo en lo que va de este año 2022 el gobierno sandinista de Daniel Ortega (76) detuvo a 3 sacerdotes, cerró 8 radios y 3 canales católicos, ingresó por la fuerza y allanó a una parroquia, y expulsó a las misioneras de la orden fundada por la Madre Teresa de Calcuta.
Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa, Rosario Murillo (71), como vicepresidente, con sus principales contendientes en prisión. Cualquiera que se exprese contrario a la dictatorial forma de gobernar de Ortega es calificado de terrorista.
Comunicado de preocupación internacional
Un grupo de 25 ex jefes de Estado emitieron el miércoles 17 de Agosto un comunicado en el que manifestaron su preocupación por la persecución del régimen de izquierda de Daniel Ortega contra la Iglesia Católica en Nicaragua y pidieron por una postura firme del actual pontífice.
Miembros de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), señalan en la “Declaración sobre el régimen Ortega y Murillo y la persecución agravada de la libertad de religión en Nicaragua” que la libertad religiosa es la “piedra de toque fundamental en la afirmación y conversación de la paz”.
Los ex mandatarios aseguran que observan “con preocupación agravada” lo que acontece en Nicaragua, donde “luego de perseguir y criminalizar los liderazgos políticos y sociales como de cercenar de modo radical toda libertad de expresión y de prensa, ahora avanza hacia la persecución de los líderes episcopales católicos, los sacerdotes y las religiosas, incluso expulsándolos del territorio nacional”.
Afirman que esperan “una firme postura de defensa del pueblo nicaragüense y su libertad religiosa por S.S. Francisco, cabeza de la Iglesia Católica universal”, quien no se ha expedido sobre esta dura situación.
El comunicado está firmado por Óscar Arias, José María Aznar, Nicolás Arditto Barletta, Felipe Calderón, Rafael Ángel Calderón, Laura Chinchilla, Alfredo Cristiani, Iván Duque, Vicente Fox, Federico Franco, Eduardo Frei, Lucio Gutierrez, Osvaldo Hurtado, Luis Alberto Lacalle, Mauricio Macri, Jamil Mahuad, Mireya Moscoso, Carlos Mesa, Andrés Pastrana, Sebastián Piñera, Jorge Tuto Quiroga, Miguel Ángel Rodríguez, Julio María Sanguinetti, Luis Guillermo Solís, Álvaro Uribe, Juan Carlos Wasmosy.
Mensaje desde los obispos de la Argentina
Por su parte, el obispo de la diócesis de San Isidro, Mñor. Oscar Vicente Ojea (75) envió el 18 de Agosto una nota al cardenal Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua, diciéndole que la Conferencia Episcopal Argentina, que él preside, sigue con preocupación la situación en Nicaragua y comprometiendo oraciones para que la tarea pastoral en ese país pueda llevarse a cabo "sin restricciones de ninguna índole".
Papa Francisco: Silencio
Ante esta situación de deliberada y planificada persecución de la Iglesia Católica, el Papa Francisco (85) no se ha expedido expresamente, algo que millones de personas han estado esperando.
Antes de la detención del obispo Álvarez hubo congelamiento de cuentas bancarias de organizaciones civiles de la iglesia católica, suspensión de la personería jurídica de esas entidades, expulsión de la Congregación de las Hermanas de la Caridad, fundada por Santa Teresa de Calcuta (la acusó de estar involucrada en actividades "subversivas").
Es llamativo que con tantos ataques, que se unen a otras acciones del pasado del régimen sandinista en el mismo sentido, no se reaccione franca y abiertamente.
