La Oficina de Prensa del Obispado de San Isidro dio a conocer la decisión de suspender todas las misas y celebraciones públicas en razón de las recomendaciones gubernamentales de evitar que la población salga de sus domicilios, salvo por razones imprescindibles. Es de estimar que, para muchos fieles la participación en la Santa Misa es realmente necesaria e impostergable, incluso diariamente.
No obstante, el comunicado difundido señala lo siguiente:
"Ante el pedido de las autoridades sanitarias de fortalecer aún más el aislamiento, les comunicamos que los obispos de nuestra diócesis,junto a los de la Región Buenos Aires, han tomado la decisión de que, a partir de hoy, se suspenden las misas y todo tipo de celebraciones públicas hasta nuevo aviso."
"Volvemos a recomendar ser creativos para mantener la cercanía pastoral con nuestros fieles."
"Se comunica, además, a toda la diócesis que, teniendo en cuenta los cánones 87 y 1245 del Código de Derecho Canónico, el obispo diocesano dispone que quedan dispensados todos los fieles del precepto dominical."