A pocas horas de que se cumpla un año de la memorable derrota que la ciudadanía argentina le asestara al lobby abortista en el Congreso de la Nación (en la sesión del 8 de Agosto de 2018), la Comisión Episcopal para la Vida, los Laicos y la Familia dio a conocer un comunicado en el que expresa su apoyo a quienes defienden las dos vidas (la de la madre y su hijo), al tiempo que alienta a la implementación de políticas públicas en el mismo sentido.
Es saludable esta comunicación pública de esta Comisión de la Conferencia Episcopal Argentina, que puede estar insinuando un cambio de actitud respecto de este tema que ha movilizado a millones de familias en el país. No significa esto que no haya habido consagrados preocupados en 2018 por el intento de avasallamiento de la vida humana, pero las declaraciones públicas institucionales de la Iglesia han sido, hasta el momento, escasas.
Las multitudinarias marchas y manifestaciones -que comenzaron en 2017 en Buenos Aires y se multiplicaron en todo el país-, fueron protagonizadas por ciudadanos de toda condición, algunos con muchos años de trabajo contra el aborto y otros sorprendidos por la propuesta de un inmoral debate sobre el valor de la vida. Esos millones de mujeres, hombres, jóvenes y niños que marcharon (y que seguirán marchando), no contaron siempre con sacerdotes en sus diócesis que los apoyaran (incluso algunos han insinuado su apoyo al aborto en ciertas circunstancias), y les dieran motivos para participar en la defensa activa de la vida o, simplemente, fueran el camino para conocer las dramáticas amenazas que se ciernen sobre la familia, la fe y su integridad.
Bienvenido el comunicado en tanto pueda sugerir que, además de los activos militantes por la vida que generó la sociedad civil y el entusiasta movimiento evangélico, la Iglesia Católica también estará públicamente en el día a día de la defensa de niños y madres.
Texto del comunicado de la Comisión Episcopal para la Vida, los Laicos y la Familia:
"Con motivo de la celebración del Día Internacional de Acción por las Dos Vidas, sumamos decididamente nuestro apoyo a todas las expresiones que defienden, cuidan y promueven las Dos Vidas, y alentamos a tener en cuenta, discutir y sancionar los proyectos referidos a las políticas públicas que se orientan en favor de la maternidad vulnerable.
Defendemos y cuidamos la vida humana en todas sus etapas porque la conciencia humana reconoce que no es lícito quitar la vida de un inocente. Además, como afirma el Papa Francisco en Laudato Si "no parece factible un camino educativo para acoger a los seres débiles que nos rodean, que a veces son molestos o inoportunos, si no se protege a un embrión humano, aunque su llegada sea causa de molestias y dificultades".
Nos unimos a muchos hombres y mujeres que dan testimonio de la belleza de la vida y el amor humano porque creen que Vale Toda Vida.
Valoramos y acompañamos a los profesionales de la salud que se entregan para salvar vidas y se mantienen fieles a su conciencia aun en las presiones que buscan soluciones contrarias a los fines de la medicina.
Reconocemos y agradecemos a los funcionarios judiciales y abogados que trabajan por garantizar los derechos de las madres y sus hijos por nacer o ya nacidos, en medio de situaciones de privación, violencias o pobreza.
Son muchos también los docentes que en la laboriosidad humilde del aula se esfuerzan por transmitir el valor de la vida como don y educan en una sexualidad nacida del amor entendido como donación de sí.
Alentamos a quienes educan en el amor a la vida, el respeto por el otro y en los valores del pudor, la pureza, la gratuidad.
Damos gracias por los comunicadores que transmiten la belleza de la vida y el amor, aun en medio de las presiones de quienes quieren una colonización ideológica de nuestros pueblos.
Dios de la Vida y del Amor, enséñanos a caminar como un pueblo fraterno con todos sin excluir a nadie, y siempre cercano y dispuesto a valorar, cuidar y promover la vida de todos, especialmente allí donde manifiesta frágil e indefensa."
Buenos Aires, 8 de Agosto de 2019
Comisión Episcopal para la Vida, los Laicos y la Familia
Conferencia Episcopal Argentina