Con la rúbrica del obispo auxiliar de la diócesis, monseñor Martín Fassi, y del intentente, Dr. Gustavo Posse, quedó reglamentado el servicio de asistencia religiosa en el Hospital Central de San Isidro.
"Por asistencia religiosa en un hospital se entiende un servicio que garantiza este derecho a los pacientes internados, familiares y cuidadores. En el ámbito sanitario adquiere una importancia de relieve porque las personas suelen sentir una renovación de su dimensión religiosa o espiritual frente a la enfermedad", explicó Posse tras la firma del convenio.
"Los servicios de asistencia religiosa de los diversos cultos tiene como objetivo: el apoyo espiritual al proceso terapéutico de la persona enferma con la escucha fraterna, la oración, y los ritos específicos del acompañamiento en la enfermedad (en la práctica católica son los sacramentos, bendiciones, y demás sacramentales y celebraciones culturales en general", dice uno de los artículos del convenio.
En cuanto a los destinatarios del servicio de asistencia religiosa habrá personas de convicción religiosa y personas que no tienen o no practican ninguna religión. Todos tienen derecho a que se les ofrezca la amistosa atención de este servicio. Al mismo tiempo, quienes asistan religiosamente deben tener el máximo respeto a la religiosidad o cosmovisión del enfermo.
Participaron también del encuentro en el despacho del intendente, la directora del Hospital, Dra. Susana Guidi Rojo, y el secretario de Integración Comunitaria, Lic. Arturo Flier.