Hubo puestos con Pastoral de Escucha y Recepción y pasadas las 18:00 se fue en procesion con la imagen de la Santísima Virgen hasta la Catedral, donde el obispo diocesano, monseñor Oscar V. Ojea, realizó una bendición.

"Desde hace un tiempo estamos realizando en la diócesis lo que llamamos 'Los Gestos Misioneros'. Son pequeñas acciones. Salidas a la calle, junto al obispo, en algunos casos, en otros casos acompañados por los sacerdotes", señaló el obispo Ojea.

"Los laicos salen a la calle para ofrecer un mensaje. El obispo, los sacerdotes, la bendición. Es intentar hacernos cercanos, ponernos a mano de la gente, escuchar a la gente, conversar con ellos, estar presentes en el ajetreo de un día viernes, sin tiempo para nada, donde muchos hermanos se detienen frente a la realidad de la presencia de una imagen de la Virgen, de una imagen religiosa, a la necesidad reconectarse con lo más profundo de ellos mismos, aún en ese instante en que habitualmente están viviendo a velocidad."