En una casona antigua de Beccar, funciona San Isidro Cine, una innovadora escuela del “séptimo arte”, única en su estilo en toda la zona norte.
La capacitación que allí se brinda, es exigente y actualizada, ya que el objetivo de sus autoridades educativas, es que los alumnos egresen con alta capacitación y total idoneidad para que estos, puedan generar, crear y dirigir sus propios proyectos.
Desde hacía varios años, el cineasta Eduardo Ruderman, junto con amigos de San isidro, algunos de ellos profesionales del cine y otros del teatro, o con hijos que se venían formando en la profesión, conversaban sobre la ausencia de escuelas de cine, que jerarquizaran la creatividad, particularmente en al zona norte.
Al respecto de los comienzos Ruderman relata: “Uno de estos amigos, me presentó a los directores del Colegio San Isidro, donde actualmente funcionamos, Claudio Aouada y Alberto Montero de la Torre, dos personas excelentes y de gran generosidad, con quienes, inspirados en dichas conversaciones, decidimos iniciar el proyecto”.
En San isidro Cine, todo el trayecto de aprendizaje es visto como un desafío que los alumnos deben abordar reflexiva y creativamente, centralizándose en el debate, la discusión y la argumentación.
“Trabajamos para que cada estudiante –pormenoriza el maestro de cine- construya una representación interna del conocimiento a partir de su interpretación personal de la experiencia vivida. Evitamos el aprendizaje por medio de la repetición memorística de preconceptos que consideramos sólo obstaculizan la tarea creativa, y, en cambio, buscamos la producción de significado a través de la lectura de los grandes creadores y teóricos del cine. De este modo, el alumno no es un receptor pasivo ante las propuestas del docente, sino que logra seleccionar sus propios objetivos y desarrollar estrategias personales de aprendizaje”.
Además, se estimula al alumno, para que desde el comienzo, aflore su mundo interno de sensaciones e imágenes, ya que para ellos es la “materia prima” de la creación y, a partir de esto, todos realizan cine, aprendiendo a usar los recursos tecnológicos en la experiencia directa.
“Nuestra propuesta pedagógica –explica el director de la institución- fue desarrollada por un grupo interdisciplinario de profesionales y docentes del cine y la televisión, investigadores en educación y de las áreas de la crítica, que tienen la certeza de que el trabajo profesional en dichos ámbitos exige una permanente reflexión acerca del “quehacer”. Los docentes de San isidro Cine han reestructurado sus talleres, en concordancia con la propuesta institucional constructivista, buscando una mayor eficacia educativa, y, por supuesto, continuando con lo que consideramos el eje protagónico de nuestra oferta, la capacitación creativa, artística y profesional”.
La enseñanza es personalizada dado que se trabaja en grupos de pocos integrantes y se hace un seguimiento de los trabajos de cada alumno.
Los alumnos que egresan, están habilitados para trabajar en el medio audiovisual en general, canales de TV, productoras de largometrajes, comerciales y documentales.
“Tenemos un acuerdo con el Sindicato de la Industria del Cine, a través del cual –comenta Eduardo- nuestros alumnos podrán cursar en SICA, las especialidades que elijan luego de haber cursado dos años en nuestra escuela, teniendo las vacantes aseguradas. Además contamos con excelente equipamiento para la realización de los trabajos prácticos”.
El cuestionamiento efectuado por los alumnos, el intercambio libre de ideas, es considerado en esta escuela, no solo como productivo sino también como una parte indispensable del crecimiento conjunto.
En septiembre Eduardo Ruderman, ha sido invitado a Madrid para dar un taller de dirección de actores en cine en el Instituto Plot Point.
San Isidro Cine: Av. del Libertador 17.842Beccar, Tel: 4743-0101 / 4361-9996
