[2006] - El día 25 de mayo de 1924, se llevaba a cabo la Primera Prueba Automovilística en el Partido de San Isidro. Hubo que esperar 13 años para que se desarrollara la segunda carrera en este lugar.
El día 3 de octubre de 1937 los sanisidrenses nos despertamos con ruidos de motores: se estaba por dar comienzo a una gran prueba de automotores, la cual se desarrolló finalmente alrededor del hipódromo local, inaugurado un par de años atrás.
Los Alfa Romeo arrasaron con los tres primeros puestos en la clasificación final. Fueron piloteados por Carlos Arzani (1°), Ricardo Masi (2°) y Nascimento Junior (3°).
En la lucha deportiva intervinieron corredores de prestigio cerno Raúl Riganti, Chiozza, Ernesto Blanco, José Garat, Martín, Garabato, Adriano Malusardi, Domingo Ochoteco, Donzino, Forrest Greene, Plácido Ruiz, Zerba Balbi, Salvador Porto y otros.
El ganador, Arzani, según declaraciones de algunos competidores, contaba con la mejor máquina; pero reconocían también que era un muy buen volante.
Los coches venían por la Avenida Bernabé Márquez (asfaltada hacía poco tiempo), desde Fleming o Andrés Rolón hacia la Avenida Santa Fe o Centenario.
Doblaban entonces por Santa Fe, que tenía un rústico empedrado y en el medio, incrustadas las vías del tranvía que jamás transitó. En la esquina mencionada se habían colocado bolsas con arena como prevención; todavía se observaban los carteles anunciando la fórmula Ortiz-Castillo, refiriéndose a las elecciones realizadas el 5 de septiembre, fórmula proclamada a tres cuadras de allí. El circuito se completaba por Dardo Rocha hasta Fleming y, desde allí, hasta Bernabé Márquez nuevamente.
Había sido invitado a la prueba con el fin de darle brillo, el gran corredor Carlos Zatuszek, quien no pudo concurrir. La policía, con el comisario Gustavo Vignardel a la cabeza, prestó colaboración en forma eficiente, cortando el tráfico y preservando el orden. La municipalidad hizo su parte al contar con el apoyo del intendente don Ernesto de las Carreras, quien se esmeró para que todo luciera como era deseado.
El pueblo sanisidrense recibió con beneplácito esta prueba automovilística y concurrió a presenciarla, quedando satisfecho por el desarrollo de ésta; que era, como se dijo, la segunda carrera de autos que se desarrollaba totalmente en San Isidro.
-> Jorge Tirigall