El Día de la Bandera se festeja en la Argentina desde 1939.
El antecedente de este día hay que buscarlo en jóvenes argentinos que se sentían indignados por manifestaciones de republicanos y nacionalistas en calles porteñas en tiempos de la Guerra Civil Española desde el 1 de Mayo de 1936.
Molestos por la aparición de símbolos extranjeros, fueron los que se ocuparon de donar el 20 de Junio de ese año a la Municipalidad de Buenos Aires una bandera argentina de 15 metros de largo x 10 de ancho a modo de desagravio y para rendirle tributo al Gral. José Manuel Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano.
El grupo juvenil integraba el Comité de la Juventud Argentina y estuvo conformado por el doctor Luis Agote Robertson, el capitán de fragata Eduardo Videla Dorna, Luis María Ferraro, el diputado nacional Daniel Videla Dorna, Ramón Oscar Castilla, el doctor Carlos Rojas Torres, Raúl y Alfredo Etcheverry, Jorge Seré y Ricardo Alberti. Los jóvenes acordaron iniciar un proyecto de ley -que quedó en manos del Cap. Eduardo Videla Dorna- para establecer un día y feriado nacional para homenajear a la bandera.
Con el aporte económico necesario fue en la tradicional Casa Vaca, de Carlos Pellegrini casi avenida Santa Fe, el grupo compró la más grande y suntuosa bandera en exhibición confeccionada en gros de seda y el sol central bordado en hilos de seda dorados, con un peso de 8 kilos.
Para resguardar la enseña hicieron construir un cofre de cristal, cuyas ocho manijas de bronce provinieron de la fundición de uno de los cañones usados en la campaña del Alto Perú, que encabezó el general Manuel Belgrano. Con los restos de esa fundición se fabricó una placa que consignaba: "Al general Belgrano: homenaje de la juventud argentina de Buenos Aires en el 116° aniversario de su fallecimiento y como creador de la bandera nacional".
El 20 de Junio, hubo cientos de estudiantes que se colocaron en filas que se unían en el Obelisco, simulando los rayos de un sol y ante el presidente Agustín P. Justo, ministros, gobernadores provinciales, autoridades eclesiásticas y formaciones escolares, el grupo le entregó la custodia al intendente de Buenos Aires, Mariano de Vedia y Mitre.
Bendecida el día anterior en la Catedral, fue llevada luego al pie del mausoleo del general José de San Martín al son de la marcha "Ituzaingó". A las 7 en punto, hora exacta de la salida del sol, un cadete de la Escuela Naval la enarboló en el mástil elevado al lado del Obelisco, a escasa distancia del sitio donde estaban emplazadas las torres de la iglesia de San Nicolás de Bari, donde el 12 de Agosto de 1812, había flameado por primera vez el pabellón nacional en Buenos Aires.
Esa misma bandera fue izada más tarde en el mástil de la Plaza de Mayo y hoy se mantiene en custodia en el Museo Histórico Nacional, gracias a las gestiones que realizó Humberto Burzi, su director, en 1960.
La ceremonia de entrega de aquella bandera fueron el antecedente del debate en el Congreso que concluyó con establecimiento del Día de la Bandera.
El proyecto elaborado por el Cap. Videla Dorna pasó por el Senado el 7 de Junio de 1938 y fue objetado por el senador cordobés Guillermo Rothe, quien un día dedicado a la bandera recargaría el calendario de festividades. Finalmente la ley Nº 12.361 no sólo se aprobó un día específico (el 20 de Junio) sino que también de determino que fuera feriado nacional.
[Fuentes: La Nación - Marcos Videla Dorna]
