Juan de Garay tenía unos 13 años cuando llegó a América. A los 4 años de su arribo, transcurridos en el Perú, se alistó en las tropas del capitan Núñez de Prado, pasando a Charcas, luego a Tarija para luego afincarse por un tiempo en Chuquisaca, hasta que acompañando al capitán Andrés Manso, estuvo presente en la fundación de Santo Domingo de la Rioja.
Juan de Garay contaba ya con 29 años cuando junto a Nufrio Chaves funda el pueblo de Santa Cruz de la Sierra donde se casó y vivió 8 años.
Luego va a Asunción donde ejerce como Alguacil Mayor y se propone "abrir puertas a la tierra".
El 15 de Abril de 1573 parte a bordo de un bergantín de gran tamaño, cinco embarcaciones menores y de numerosas canoas, acompañando a la carabela "San Cristóbal de Buena Ventura" que seguiría viaje a España. Siete meses después, el 15 de Noviembre de 1573, en un lugar denominado Cayastá, fundó la ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz (Santa Fe La Vieja).
Fortuitamente se encuentra con una partida a las órdenes de Jerónimo Luis de Cabrera, con quien luego quedaría unido al casarse sus hijos (María Garay y Gonzalo Cabrera).
El 29 de Mayo de 1580, día de la Santísima Trinidad, echó anclas en el Riachuelo de los Navíos. En los días sucesivos Juan de Garay, resuelve fundar nuevamente la ciudad rodeado de 10 hombres españoles, 54 hombres entre criollos y mestizos y una mujer. Llamó, como quedó registrado. A la ciudad la llamó "de la Trinidad" y al puerto "Santa María de Buenos Aires".
En 1996, luego de 416 años de hablarse y firmarse documentos mencionando a la ciudad con el nombre del puerto, la Constitución del distrito capital de la Argentina dejó oficialmente instalado el nombre de Buenos Aires.
La tropa que siguiera por tierra desde Santa Fe, costeando el Paraná fue la que tuvo el raro privilegio de gozar de la primera visión colonizadora de la zona norte de la nueva ciudad, luego de vadear los arroyos y los ríos de los Arrecifes, el Luján y Las Conchas, siguiendo las sendas o "rastrilladas" de los guaraníes.
Meses después, Juan de Garay hizo el reparto de tierras comenzando desde las inmediaciones de lo que hoy es la Plaza San Martín en Buenos Aires, para terminar un poco mas allá de lo que es San Isidro.
Según lo dispuesto, estas parcelas (llamadas "suertes") debían tener un ancho mínimo de 300 varas (260 metros) hasta un máximo de 500 (433 metros) por un legua de fondo (5.196 metros).
De acuerdo a la ubicación de aquellas chacras, en la actualidad las 28 primeras estarían dentro de los límites de la Capital Federal, luego las 3 siguientes ocupan parcialmente la provincia, y hasta la 46 dentro del partido de Vicente López; desde la suerte 47 hasta la 63 (o sea 17) corresponde ubicarlas dentro del municipio de San Isidro, y las últimas 2 (la 64 y la 65) en el partido de San Fernando.
Adjudicadas las suertes, los pobladores denominaron a lo que hoy es San Isidro “Monte Grande”, según se desprende de la documentación y cartografía de la época. La vegetación existente consistía de sauces, ceibos, arbustos espinosos, chañares, talas y ombúes.
El fundador Garay se encontraba fascinado por las fértiles tierras que se extendían al borde del Río de la Plata, lo que lo anima también a lanzarse hacia el sur acompañado con 30 jinetes. Descubre a lo largo del camino que las aguas van perdiendo su dulzor y color de león, para tornarse saladas y llega, después de varias jornadas, a unas playas cuyas arenas eran bañadas por unas tumultuosas aguas azuladas. Maravillado ante el espectáculo exclamó: "Llamaré a esta ribera la muy galana costa", pensando que mas adelante fundaría en ella otra ciudad. Otros lo hicieron por él, llamándola Mar del Plata.
