El genocidio armenio se materializó con el brutal exterminio por parte del gobierno turco de civiles armenios, calculado en aproximadamente 1.500.000 de personas desde 1915 hasta 1923.
Este triste episodio para la humanidad entera tuvo sus orígenes en los reclamos civiles para no ser tratados como habitantes de segunda, que disgustaron al sultán Hamid II a principios de 1900 quien dispuso verdaderas masacres sobre las minorías étnicas.
La fecha del comienzo del genocidio se conmemora el 24 de Abril de 1915 (aunque el episodio comenzó en la noche del 23), cuando autoridades turcas detuvieron a más de 600 miembros de la comunidad de armenios en Estambul. Posteriormente, una orden del gobierno central, ejercido por los Jóvenes Turcos (inicialmente apoyados por los armenios), estableció la deportación de toda la población armenia, sin posibilidad de cargar los medios para la subsistencia, y su marcha forzada por cientos de kilómetros, atravesando zonas desérticas, en las que la mayor parte de los deportados murió por el hambre, la sed y las privaciones.
Aunque la República de Turquía, sucesora del Imperio otomano, no niega que las masacres de civiles armenios ocurrieron, no admite que se trató de un genocidio, argumentando que las muertes no fueron el resultado de un plan de exterminio masivo, sistemático y premeditado dispuesto por el Estado otomano, sino que se debieron a las luchas interétnicas, las enfermedades y el hambre durante el confuso periodo de la Primera Guerra Mundial.
La realidad es que, el duro devenir de la historia del pueblo armenio, sometido, invadido y gobernado por fuerzas ajenas desde tiempos lejanos y hasta su independencia definitiva en la década del '90 tiene, en los acontecimientos iniciados de 1915, la propiedad de una de las páginas más horrorosas de la humanidad.
"Inventar" la historia
Como ocurrió en otros países (Argentina incluida) los gobiernos ejercidos por personas relacionadas o adherentes a hechos aberrantes, buscan relatar o interpretar los acontecimientos para los que ignoran sus detalles.
La política turca afirma que los más de 600 armenios arrestados en Estambul (describe que el arresto era seguido por la ejecución), que hubo en la noche del 23 de Abril y durante la madrugada del 24, respondió a que todos ellos eran sospechosos de atentar contra la integridad del Imperio a causas de la de sus "ideas revolucionarias".
En realidad, como parte de un plan que buscaba evitar que los armenios se organizaran en rebeldía, la intención era eliminar a intelectuales, políticos, poetas y religiosos.
A estos arrestos debe sumársele el enrolamiento de los hombres de entre 15 y 45 años con la excusa de sumarlos a la guerra con Rusia. La búsqueda es quitarle "brazos" a la comunidad armenia y evitar que se armen en su contra.
Con el argumento de trasladar a los armenios a zonas donde no se vean amenazados por la guerra, el gobierno turco deportó y asesinó cruelmente a cientos de miles de mujeres, niños y ancianos armenios, fusilando incluso a los soldados turcos que se opusieran a cumplir órdenes.
Estaban planificadas todas las rutas de deportación, al norte se los ahogaría en el Mar Negro, los que vivían en el centro de Anatolia, serían llevados sin víveres y caminando hasta el desierto de Der Zor, donde serían arrojados a los pozos naturales para luego quemarlos.
El gobierno turco buscó por todos los medios evitar la "causa armenia". Al igual que ocurriera con Adolf Hitler y la supremacía aria, el fanatismo en el poder buscaba desechar todo aquello que no fuera turco.
La causa búlgara tuvo como resultado Bulgaria, lo mismo sucedió con otras causas y pueblos que se independizaban del Imperio en occidente destruyéndolo. Pero nunca permitirían una Causa Armenia.
Desde que se cometió el Genocidio Armenio, Turquía tuvo que remodelar su historia. Para ello, fijó dos metas: 1) borrar cualquier vestigio de Cultura Armenia dentro de los límites del país y 2) desligarse totalmente de la historia e imagen otomana.
Mustafá Kemal (Attatürk), decretó un nuevo alfabeto, abolió los califatos y prohibió el uso del fez (símbolo otomano por excelencia) entre otras cosas. Sin duda alguna su mayor deseo era desligar su imagen a la del ex Imperio Otomano y junto con él, la imagen del genocidio armenio, del cual fue también coautor intelectual y material. No obstante ello, actualmente se conmemoran los aniversarios de la creación del Imperio y restos mortales como los del Gran Visir genocida del Imperio Otomano contra los armenios, Mehmet Talaat Pashá fueron repatriados al corazón de Turquía hace ya unas décadas.
En cuanto a la historia armenia en Turquía, es ignorada y omitida por el Ministerio de Cultura Turco. Cada edificio, templo o construcción realizado por armenios es atribuido a cualquier otra civilización. No se evidencia de esta manera que los armenios son los más antiguos habitantes de la región de Anatolia, del Cáucaso y de la Meseta Armenia.
Turcos y armenios han vivido en guerra en varias ocasiones y hoy viven en paz, aunque todo lo vivido por estos pueblos en tantos años no es olvidado. Y no es para menos.
El centenario
"Cada día de 2015, es un día para el recuerdo" señaló el patriarca ortodoxo armenio Karekin II.
Tras la condena del "genocidio" armenio cometido hace un siglo por los otomanos realizada por el Papa Francisco durante la misa el domingo 12 de Abril, las autoridades turcas han salido a su cruce, y fue el ministro para los Asuntos Europeos, Volkan Bozki, quien lanzó duras críticas tanto al Papa como a nuestro país.
"El Papa Francisco es argentino y encuentro necesario recordarles que Argentina es un país que recibió con brazos abiertos a los principales ejecutores del Holocausto judío, los torturadores nazi. Creo que el Papa actuó bajo la influencia de su ciudadanía argentina en lugar de la identidad transnacional", afirmó Bozkir en diálogo con medios locales. Y agregó: "Creo que el Papa, cuando lo piense bien, va a sentir la necesidad de retractarse de sus dichos".
El domingo, Francisco había utilizado expresiones del fallecido papa Juan Pablo II, redactadas en 2001, refiriéndose al "atroz y descabellado exterminio" de los armenios, que "generalmente es considerado como 'el primer genocidio del siglo XX'".