Coco Oderigo y Raúl Crespo Montes recibieron el Premio San Isidro 2019
Como sucede desde hace 36 años, la Academia Provincial de Ciencias y Artes de
San Isidro realizó la entrega del premio que distingue a personalidades
destacadas, no por un hecho excepcional, sino por toda una vida de servicio y
dedicación hacia la comunidad sanisidrense.
En esta ocasión, el
17 de Mayo en la Quinta Los Ombúes [Adrián Beccar Varela 774,
San Isidro] Alberto David Leiva, presidente, y Mauricio
Obarrio, vicepresidente, distinguieron al Dr. Eduardo "Coco"
Oderigo y al Dr. Raúl Máximo Crespo Montes con el
Premio San Isidro 2019.
Recibieron la distinción post mortem al Dr.
Crespo Montes, impulsor de este premio y reconocido por muchos
méritos ligados a la educación y la cultura, sus hijos Martín,
Javier y Laura.
"Nuestro padre
vivió buscando una existencia auténtica, con vocación de servicio de su país y
de San Isidro, su lugar por elección.
De esa manera tomó el control de su destino sin mirar atrás y construyendo
siempre para adelante", señaló emocionado Martín.
"Las águilas no forman bandadas. Uno tiene la suerte de verlas volar de
a una, nosotros tuvimos la inolvidable suerte de habitar su nido y Uds.,
seguramente, de volar junto a él. Papá y seguramente Uds. para bien de la
cultura y educación del país, siempre han encontrado vientos favorables. Luchó
sin hundirse en los momentos desfavorables. Agradecemos a Uds. y en especial a
nuestro padre todo el esfuerzo volcado para que hoy sigamos siendo gente de
bien".
También le fue otorgado el Premio San Isidro 2019 al Dr.
Eduardo Oderigo (h), nieto del prestigioso abogado
Mario Oderigo (uno de los grandes juristas argentinos) que, a
partir de su experiencia como jugador de rugby creo un proyecto de
rehabilitación de personas detenidos utilizando los valores de ese deporte.
Desde la Fundación Espartanos cientos de personas se han
beneficiado encontrando un horizonte nuevo, alejados del delito, en 17
provincias argentinas y en el exterior (Uruguay, Chile, Brasil, El Salvador,
Perú, España, Italia y Kenia).
La estadística es contundente: Quienes pasan por el proyecto de
la Fundación Espartanos en una unidad penitenciaria sólo reinciden en el delito
en un 4 o 5%, cuando el promedio de los que no ronda el
60%.
Al momento de agradecer el Premio, el Dr. Oderigo destacó
que, actualmente la Fundación Espartanos incluye a 650 voluntarios para llevar
los valores del rugby a 2.300 personas detenidas.
"Me gusta destacar al equipo por sobre las personas. No vamos a estos
lugares con tristeza sino con alegría. Nos divierte, nos apasiona el rugby, que
está en el corazón de San Isidro. Este premio me llega especialmente porque es
del lugar donde nací".
Recordando los inicios de Los Espartanos, Oderigo dijo que
todos los martes durante los primeros cuatro años fueron dos ex jugadores
buscando entrenar a apenas 15 personas, de los cuales varios estaban drogados y
el resto tenía alguna ansia de cambiar de vida.
Recién cuando a un amigo se le ocurrió la feliz idea de rezar el Rosario fue
cuando comenzaron a aparecer las adhesiones y el proyecto empezó a crecer como
esperaban. "Yo en la cárcel aprendí a pedir perdón", se sinceró
Coco Oderigo, queriendo significar que desde esa palabra,
expresada francamente, es posible construir una sociedad mejor, se haya
delinquido o no.