El colegio Las Lomas Oral, una asociación civil sin fines de lucro desde hace 30 años brinda servicios educativos a niños con pérdidas auditivas desde el nacimiento, llevó a cabo su encuentro anual de recaudación de fondos en el salón Tattersall.
Mariela Perkins revivió el momento más difícil de su vida al enterarse de que su hijo era sordo: "Santiago era chiquito y cuando la fonoaudióloga subió el volumen de un sonido muy agudo, mi hijo no tuvo reacción; fue muy duro el impacto de la noticia. El camino fue largo y complejo, pero hoy podemos decir que cumplimos la misión y mi hijo es feliz".
Durante la cena solidaria, se realizaron sorteos con importantes premios, subastas de camisetas de fútbol, raquetas de tenis, palos de hockey y shows en vivo. Además, se proyectaron vídeos con el trabajo de la institución.
A la gala anual asistieron más de 900 personas y gracias a la colaboración de la municipalidad de San Isidro, de distintos colaboradores y de empresas, se logró recaudar el 35% del presupuesto anual del Colegio Las Lomas Oral.
"Sin el apoyo del Municipio no hubiéramos podido comenzar, contamos con su apoyo incondicional que se renueva año tras año y trabajamos muy cómodos", afirmó Mariela Perkins, la directora de la institución.
De la cena participó el intendente de San Isidro, Dr. Gustavo Posse, quien valoró la tarea que realiza la entidad y destacó: "Las Lomas Oral es el único centro que está certificado para llevar adelante esta reeducación en Latinoamérica y nosotros lo tenemos en San Isidro. Aspiramos a que se puedan fundar más instituciones de este nivel".
El intendente también destacó el convenio entre el colegio y el servicio de fonoaudiología del Hospital Materno Infantil de San Isidro, que realiza el examen universal de audición para los bebés recién nacidos.
El desafío del colegio es enseñar a cada niño a escuchar y a hablar, al mismo tiempo que incorporan los conocimientos requeridos para el año lectivo que está cursando.
Juan Pablo Blagiardi, de Vicente López, contó entre lágrimas que su hija está en el último año del primario del colegio: "Junto con mi mujer vivimos el avance día a día de Celeste, hoy está a punto de terminar sus estudios y estamos muy felices por el trabajo que hace la institución, le cambiaron la vida a mi hija y a toda mi familia".
Gustavo Santillán, de Villa Bosch, comentó que su hijo egresó hace 3 años del colegio y destacó: "En nuestra desesperación, este lugar nos dio la fortaleza para afrontar la situación que estábamos pasando con Facundo. Eso hizo que hoy mi hijo tenga grandes oportunidades".