El intendente de San Isidro, Dr. Gustavo Posse, expresó "El club Social de Beccar es una  institución muy antigua de la localidad que se remodeló a nuevo; los socios y vecinos tuvieron mucha paciencia y finalmente hoy es una referencia muy importante para San Isidro y zona norte. El patinaje artístico es muy elegido por las mujeres, que comienzan desde muy chicas y trabajan durísimo para después dar demostraciones como las que estamos viendo hoy. El hecho de que salgan campeones nacionales de este grupo, al Municipio lo llena de orgullo”.

Carla Paola Rodríguez es la profesora y encargada de esta prestigiosa escuela de patín desde hace casi 20 años. “Hoy estamos viviendo el show anual de patín que hacemos como cierre cada año, al terminar las clases. Acá los alumnos demuestran todo lo que aprendieron en el ciclo. Se juntan todos, los que recién comienzan en la escuela, hasta los campeones”, explicó.

Los números que se representan en esta fiesta multitudinaria cuentan una historia, dependiendo el nivel de cada uno y lo que aprendió durante el año. Esta vez las más experimentadas representaron la obra Cats, mientras que los más pequeños hicieron de hadas, muñecas, y diversos personajes fantásticos.

Debora Baña, de Beccar. es patinadora y asiste desde pequeña a la escuela: “Hoy venimos a mostrar lo que sabemos hacer. Patinamos de toda la vida, entrenamos un promedio de dos a tres horas por día, tres o cuatro veces por semana. El Municipio nos ayuda mucho con este evento, nos presta todo el sonido, las luces y también la parte de la locución. Estamos muy agradecidos”.

Antonella Piedra y Facundo Pisurico, de 20 años, se conocen desde los tres, entrenan en el Club y esta noche vienen a mostrar porqué salieron campeones argentinos en Córdoba, el pasado mes de mayo. “Fue hermoso para los dos; este año se cumplen ocho años desde que patinamos juntos y disfrutamos mucho hacer esto”, comentó Antonella.

“La municipalidad de San Isidro siempre nos apoyó, este año recibimos ayuda económica para poder viajar y cumplir el primer sueño del Club Social de Beccar que era salir a competir con el resto del mundo. No es un deporte tan visible, por eso nos cuesta mucho llegar a donde queremos. Ponemos mucha garra, esfuerzo, voluntad, todo junto”, expresó Facundo.

Araceli Bedoya, mamá del joven, muy emocionada confesó que esta fiesta resume el esfuerzo de los chicos durante todo el año, donde entrenan muchas horas, y además de preparar los trajes, arman las coreografías, todo a pulmón.

A la escuela de patín asisten alrededor de 200 patinadores anualmente. Este año no sólo lograron obtener el título de campeones nacionales, en la categoría mayores del torneo más importante del país en esta disciplina, sino que también clasificaron en un certamen  internacional y pudieron viajar a Girones, en España.