El 28 de Octubre de 1834, luego de que se habilitara el puerto de San Isidro Labrador, se creó la Subdelegación del Puerto de San Isidro recayendo la autoridad en el juez de Paz local, Enrique Nuñez. Este suceso marcó el hito histórico fundacional de la Prefectura San Isidro [Av. Mitre 1385, San Isidro].
La de San Isidro es una de las primeras 8 sedes de la Prectura en el país y en la actualidad cuenta con nuevos y sofisticados equipos e instalaciones con mayores propiedades técnicas al servicio del navegante.
El predio que ocupa en la costa sanisidrense fue cedido por el gobierno provincial, en tanto que el Concejo Deliberante de San Isidro instituyó el 28 de Octubre de cada año como el Día de la Prefectura San Isidro.
Remontándonos a los inicios más remotos de la Prefectura Naval Argentina, el 3 de Febrero de 1536 arriban a estas costas las naves de la armada de Pedro de Mendoza, fundando la población que se denominó "Puerto de Nuestra Señora Santa Maria del Buen Ayre".
Mendoza representó la primera autoridad que ejerció funciones policiales en el puerto y en la ciudad. A partir de la segunda fundación de Buenos Aires, el 11 de Junio de 1580, realizada por Juan de Garay, los funcionarios, en nombre del Rey de España nombraban y proveían de títulos a los distintos funcionarios.
Entre ellos estaban los Alguaciles Mayores de la Ciudad de la Trinidad y Puerto de Buenos Aires de Mar y Tierra, quienes hacían visitas a los buques en el Puerto, inspeccionaban la mercadería y esclavos que llegaban al puerto y controlaban a todos los barcos que entraban o salían, verificando sus permisos de navegación; además, tenían voz y voto en el Cabildo. A su vez nombraban a otros funcionarios de menor jerarquía. De todas maneras no existía una sola autoridad que ejerciera esas funciones.
A medida que España fue perdiendo hegemonía, a consecuencia de las frecuentes guerras, el comercio ilegal y la piratería aumentaron. Con el correr de los años la actividad del puerto de Buenos Aires obligó necesariamente a disponer de un servicio de vigilancia y severo custodio de los dominios para detectar la presencia de piratas, hacer frente a las constantes amenazas de invasión de las fuerzas inglesas y francesas y combatir el contrabando. Además, el conflicto con Portugal quedaba siempre latente, con sus peligrosas influencias sobre la Colonia del Sacramento, cuyas tendencias expansionistas sobre el Río de la Plata y el Paraguay eran visibles.
Las autoridades de la colonia, dispusieron la creación de las Capitanías de Puerto, las que fueron regidas por las Leyes de Indias, hasta el 8 de Marzo de 1793, oportunidad en que se sancionaron las "Ordenanzas generales", que reglamentaban las funciones de Policía General de los Puertos y Fondeaderos, a cargo de los Capitanes de Puerto y las demás obligaciones de estos.
El Rey de España designó el 8 de Enero de 1756 al Piloto Práctico del Río de la Plata Juan Antonio Guerreros, primer Capitán de Puerto de Buenos Aires. El último Capitán oriundo de España fue Pablo Zizur quien, debido a su avanzada edad y precaria salud, fue reemplazado en el año 1806 por el Alférez de Fragata de la Real Armada Española, Martín Jacobo José Thompson, nacido en Buenos Aires, que de esta manera se convierte en el primer Capitán de Puerto criollo y último designado por el Virreinato.
El Capitán Carlos Belgrano -hermano del General Manuel Belgrano-, fue Comandante militar y director de las obras del canal San Fernando, funciones que desempeñó desde 1804 a 1806. A principios de 1810 el Virrey Cisneros lo nombró comandante de San Fernando. En 1810, además de la Capitanía que funcionaba en el Puerto de Buenos Aires, existía una Subdelegación de Marina o Comandancia de matriculas, con tareas registrales de buques, a cargo del Capitán español José Laguna y en el Puerto de Montevideo tenía su asiento la Comandancia de la Armada Real, la que a partir del primer grito de libertad se convirtió en una fuerza enemiga.
La Primera Junta de Gobierno vio la necesidad de organizar su estructura de Estado y determinó cuáles de las instituciones españolas existentes debían ser incorporadas y a quiénes debían ser confiadas. Analizada la situación, el 25 de Junio de 1810 se dispuso que tanto el Capitán de Puerto Martín Jacobo Thompson, como el Subdelegado de Marina Laguna, pasaban a depender del primer gobierno patrio dejando de obedecer a las autoridades españolas, debiendo confirmar su aceptación.
Thompson, ferviente impulsor de la Revolución, aceptó el cargo y su nombramiento fue confirmado por la junta el 30 de Junio de 1810, paralelamente se le asignan las funciones de Laguna, que presentó su renuncia. Queda de esa manera constituida la nueva Capitanía de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Había nacido la actual Prefectura Naval Argentina, primera y única autoridad marítima y la fuerza de seguridad más antigua de la Nación.
[Foto: Prefecto Principal Alejandro Luis Gaggiolo, titular de la Prefectura San Isidro]