San Isidro vivió una fiesta en la tarde del domingo 25 de Agosto con una nueva edición del clásico más importante del rugby nacional. Así, el Club Atlético de San Isidro (CASI) venció al local, el San Isidro Club (SIC), por 51 a 7.
El intendente, Gustavo Posse, se acercó a Boulogne junto a sus hijos, Melchor y Macarena, para presenciar el encuentro. "Esto es una concentración de vecinos y amigos, que nos reunimos para ver este clásico del rugby. Acá no importa cómo viene cada equipo, es un partido aparte, uno puede estar peleando la punta y otro más abajo, pero los dos van a poner lo mejor de sí y el resultado siempre es incierto, puede ganar cualquiera", expresó Posse, y confesó tener el corazón en ambos clubes.
Posse destacó el clima de este clásico, donde en las tribunas conviven en paz las dos hinchadas, sin insultos ni agresiones: "San Isidro vive este evento de una manera muy linda. Hay un almuerzo previo y un tercer tiempo después. Vienen muchas familias, hombres y mujeres de todas las edades. También hay que destacar el respeto por el arbitraje, siendo un deporte de tanto contacto y con reglas tan complejas. Como vecino lo disfruto mucho".
El partido correspondió a la octava fecha del torneo "Top 14" de la Unión de Rugby Buenos Aires (URBA). Se trató del 119º clásico de la historia. El CASI domina el historial con 64 triunfos, mientras que el SIC cosechó 45 y hubo 10 empates.Ç
Antes de salir a la cancha, Rolando Martin, entrenador del SIC, afirmó: "Este es el partido esperado por todos. Con el CASI somos amigos durante los 365 días del año, pero en estos 80 minutos cada uno defiende su club a morir. No hay nada más lindo que jugarlo, cada clásico es único e irrepetible y siempre les digo a los jugadores que lo tienen que disfrutar al máximo".