El CASI se impuso a La Plata por 21 a 18 para prenderse en la lucha del Top 14. El SIC aniquiló a Newman 55 a 13.
Arrancó con todo La Plata porque, en apenas dos minutos y tras una pelota recuperada que abrieron rápido a la punta, Augusto Ramos definió para borrarle el cero a la chapa. Enseguida tuvo un penal Panichelli para descontar, pero su tarde de gloria no comenzó de la mejor manera.
Los dos utilizaban el pie buscando poner el juego en campo contrario y así provocar las equivocaciones en el rival, pero el canario lucia más aplomado con los gordos que marcaban el ritmo para forzar un penal que Suffern Quirno cambió por puntos. Más tarde y por la misma vía, el 10 le daba los primeros porotos al CASI para quedar 8 a 3.
Los platenses continuaban siendo superiores, aunque no podían hacerlo efectivo en el tanteador. A los 22 minutos el canario sufrió una baja clave, ya que su capitán y pateador Dimas Suffern Quirno, salió lesionado y ese cimbronazo lentamente comenzó a sentirse.
Las acciones estaban parejas, pero la visita tenía más iniciativa para el juego, de la mano de su medio scrum que encontraba espacios en la defensa, pero fallaba en los últimos metros.
Otra vez Panichelli sumaba con el pie y descontaba, para terminar la primera etapa mejor perfilado por la amarilla que vio Pablo Sciarreta.
Con el partido 8 a 6 a favor del amarillo, las cebras fueron a buscarlo. Sin embargo, los dirigidos por Meneses y Carrara seguían sumando, ahora por intermedio de Patricio Roán quien falló en las dos primeras que tuvo, pero la tercera fue la vencida y estiró la diferencia.
Las imprecisiones en ambos conjuntos los privaban de sumar, aunque los de San Isidro comenzaron a ser más punzantes a la hora de atacar y de esa forma arrinconaron a los de Gonnet, quienes se defendían bien, pero cometían muchas infracciones en su propio campo.
Con cuatro penales de su apertura, el local se puso al frente por 18 a 11. El canario no se deprimió, fue por el empate y, a falta de cuatro minutos para el cierre, un buen maul de los forwards visitantes depositó en el ingoal a Martín Haidar para que con la conversión de Roán quedasen igualados.
En el minuto ochenta y cuando los corazones palpitaban a más no poder, hubo un penal para el dueño de casa que su goleador no falló y puso el 21 a 18 final para que la Catedral estalle de alegría. Los platenses tuvieron una más pero la buena defensa de su oponente no le permitió la heroica.
Con este triunfo el CASI se levanta de la dura derrota sufrida en la primera fecha ante Pacific y le prende velas a Panichelli para que su zurda siga encendida dentro de una semana cuando viaje a Tortuguitas para visitar a un Alumni que viene con un andar envidiable.