Pampas XV se consagró campeón de la Vodacom Cup al destronar en la final a Bulls por 14-9, en Potchefstroom. Con la destacada presencia de Martín Landajo, jugador del CASI, los argentinos terminaron festejando un merecido título.
En las horas previas a la final, el entrenador tucumano Daniel Hourcade se expresó a través de su cuenta de Twitter y contó cuál era el plus con el que contaban los argentinos de cara a la definición. “Somos familia”, dijo. Y esa unión en el conjunto pampa fue decisiva a la hora de defender con uñas y dientes lo obtenido a lo largo de estos tres meses que llevan en Sudáfrica.
Esta vez no hubo lujos, goleadas ni jugadas impresionantes, pero los jugadores entendieron a la perfección la instancia que estaban disputando y se amoldaron a un libreto más sencillo, pero igual de efectivo una vez consumados los 80 minutos de juego ante un defensor del título limitado pero con armas suficientes para complicar la historia.
La tercera fue la vencida y, tras dos oportunidades de acercarse al ingoal, los argentinos llegaron al try a través de Agustín Gosio, que recibió un pase por encima de la marca de Martín Landajo y apuntó decidido a la línea de meta para sumarse al penal que ya había anotado Nicolás Sánchez.
Los visitantes contaron con chances de achicar el tanteador con el pie de Manitz Boshoff, pero le quisieron pagar con la misma moneda a un equipo que estuvo bien plantado en defensa y que mostró tackle y compromiso en sus 15 hombres para ponerle un candado al preciado cero en su chapa e irse al descanso ganando 8-0.
El complemento se hizo algo más pausado como consecuencia de algunos errores en el manejo de la pelota de ambos lados y un par de lesiones en el equipo sudafricano que obligaron a no disputar el scrum debido a la falta de primeras líneas
Primero Sánchez y luego su reemplazante, Santiago González Iglesias, sumaron con el pie para Pampas, mientras que Boshoff conseguía los primeros puntos con su pie a favor de Bulls y dejaba el pleito 14-6 a favor de los anfitriones a falta de 18 minutos.
En el tramo final de la definición, el elenco sudafricano se puso a tiro de try convertido con otro acierto a los postes de Boshoff, pero después de la salida los argentinos no cedieron más metros de la cuenta y derribaron en mitad de cancha las aspiraciones de su rival. Tomás Cubelli le robó la pelota de las manos a un jugador contrario, pelotazo afuera y a festejar.
