"Cuando se da un asalto, necesariamente hay hombres a la cabeza. Pero es preciso, para que se dé el asalto, que los primeros mueran."Antoine de Saint Exupéry en "Piloto de Guerra".
Nuestra Fuerza Área Argentina, celebró el viernes 10 de Agosto de 2007, sus primeros 95 años de existencia, y acaso el mejor homenaje que pueda hacerse a toda institución humana es recordando el nombre y la memoria de aquellos hombres, que con su vida y su sangre, supieron honrarla, y en ella a la Patria.
Porque asumieron el compromiso de la palabra empeñada, por Dios y por la Patria, de morir antes que deshonrarla. Y lo respetaron y cumplieron ofrendando su vida como caballeros cristianos que fueron.
Y lo hicieron por que la Patria, que está por encima de cualquier división o bandería política, unifica y consolida. Porque el Bien Común de la Patria está por encima de todo, y debe anteponerse a los intereses particulares, mezquinos y egoístas de quienes miran su propio beneficio.
Larga es la lista de los hombres de la fuerza que hoy montan guardia y velan la patria argentina junto a los ejércitos celestiales, recordar a quienes cayeron a manos del odio inveterado de la guerrilla marxista o la heroicidad de los pilotos en la gesta malvinera es una obligación para todo argentino bien nacido.
Vaya nuestro profundo homenaje a todos aquellos hombres y mujeres que supieron -y saben- llevar bien Alto su Amor a la Patria.
Como homenaje final reproducimos la carta que el Mayor Falconier escribiera a sus hijos poco antes de morir en Malvinas:
A Ñequi y Mononi:
Su padre no los abandona, simplemente dio su vida por los demás, por ustedes y vuestros hijos... y los que hereden mi PATRIA.
Les va a faltar mi compañía y mis consejos, pero les dejo la mejor compañía y el más sabio consejero, a DIOS; aférrense a EL, sientan que lo aman hasta que les estalle el pecho de alegría, y amen limpiamente, que es la única forma de vivir la "buena vida", y cada vez que luchen para no dejarse tentar, para no alejarse de EL, para no aflojar. Yo estaré junto a ustedes, codo a codo aferrando el amor.
Sean una "familia", respetando y amando a mamá aunque le vean errores, sean siempre solo "uno", siempre unidos.
Les dejo el apellido: Falconier para que lo lleven con orgullo y dignifiquen, no con dinero ni bienes materiales, sino con cultura, con amor, con belleza de las almas limpias, siendo cada vez más hombre y menos "animal" y por sobre todo enfrentando a la vida con la "verdad", asumiendo responsabilidades aunque les "cueste" sufrir sinsabores, o la vida misma.
Les dejo: - muy poco en el orden material, - un apellido: "Falconier", y - a DIOS (ante quien todo lo demás no importa)
Papá
Para que mis hijos lo lean desde jóvenes y hasta que sean viejos, porque a medida que pasen los años, adquieran experiencia, o tengan hijos, le irán encontrando nuevo y más significado a estas palabras que escribí con amor de padre.