Irán los que viven el dolor de tener a sus hijos lejos porque los desmanejos gubernamentales los expulsaron, irán los miles que han sido víctimas de la delincuencia, los que no quieren que se siga matando niños por nacer en los centros de salud, los que están hartos de los piquetes y los paros, irán los que están cansados de que el Estado los ahogue con impuestos y dilapide el dinero en los negocios de la política, los que quieren proteger a sus hijos de las perversiones de la ideología de género impuestas en la escuela (además de la TV, el cine, etc.), los empecinados honestos que no bajan los brazos a pesar de todo, y los muchos que ya no saben cómo hacer para sostener a su familia en medio de tanta crisis.

Pero también estarán en condiciones de poner su voto en las urnas los 8 que, según las estadísticas, ese día se van a suicidar, los que no comprenden lo que leen porque así los "educaron" en la escuela, los consumidores de drogas y alcohol (la Argentina es el 4º país de la región en consumo), unos 36.000 presos bonaerenses y casi 1.200.000 menores de 18 años.

Las urnas estarán colmadas de boletas de los que vayan y elijan desde su particular situación qué candidatos les apetecen. Habrá votos-bronca, votos-esperanza, votos en blanco y votos de escaso compromiso ciudadano. Los resultados de los comicios deben analizarse seriamente incluyendo todas las variables.

Décadas de destrucción del entramado social, de la cultura del trabajo, del otrora excelente sistema público de educación, de medios de comunicación alejados de la verdad y el buen gusto, dan por fruto una ciudadanía debilitada, frágil, engañable. Y eso, que es malo para todos, no se va a corregir en poco tiempo.

En el país votó el 13 de Octubre el 69,62% de los que estaban en condiciones de hacerlo, lo que significa que 10.474.831 ciudadanos no participaron en la elección para presidente.
 
En la provincia de Buenos Aires el escrutinio mostró que no participaron 4.566.659 en la elección para gobernador. Hubo 988.492 votos en blanco y 73.210 votos nulos. Vale mencionar que en este distrito no existe la segunda vuelta y se gana con sólo un voto de diferencia.

En San Isidro votó para intendente el 68,37% del padrón (196.050 ciudadanos). Y el 6,92% de los vecinos (13.573) no votó a ninguno de los candidatos a intendente.

En el territorio bonaerense para presidente el más votado fue Javier Milei, seguido por Sergio Massa y por Patricia Bullrich. Para gobernador los bonaerenses votaron en su mayoría a Axel Kicillof, seguido por Carolina Píparo y Néstor Grindetti.

Unión por la Patria obtuvo la mayor parte de los votos para senadores y para diputados nacionales, por encima de Juntos por el Cambio.

Para diputados quedó a la cabeza La Libertad Avanza, seguido por Juntos por el Cambio y Unión por la Patria.

Habrá que ver qué sucede en los comicios de este domingo 22 de Octubre, pero según los resultados de las elecciones P.A.S.O. la alianza Juntos por el Cambio resultó el frente más votado para intendente en 75 municipios. Por su parte, el frente Unión por la Patria fue al más votado para el cargo de intendente en 57 distritos.


-> Alberto Mora