Nos regaló lo mejor que alguien puede dar a otros: sonrisas
Roberto Gómez Bolaños, el gran creador mexicano, que cultivó una forma de humor ocurrente, fresco y, sobre todo, sano, acaba de fallecer a los 85 años.
Se había anunciado varias veces que había muerto y siempre era mentira, pero esta vez no.
Durante décadas Chespirito (nombre que resumía su capacidad creadora y su espíritu de niño) nos ofreció pequeñas historias barriales que, aunque ambientadas en México y con cantidad de palabras propias del hablar cotidiano de ese país, las sentimos como propias.
El Chavo del 8, surgido en 1971 y en el aire durante más de 2 décadas, nos hizo ver una y otra vez historias simples, con escenas repetidas que siempre provocaban risa, con hábiles juegos de palabras, con cariño (a pesar de más de un coscorrón).
Todos los personajes creados por Gómez Bolaños se nos metieron en la vida y hasta en la forma de hablar: el entrañable Don Ramón (o Rondamón), el eterno enamorado profesor Jirafales, la bruja del 78, el señor Barriga, la Chilindrina, Quico y el Chavo, son parte de nuestra infancia y de miles de hombres y mujeres en América. Es grato recordarlos y sorprendente la cantidad de textos y gags que creó Chespirito.
"Chiripiorca", "Fue sin querer queriendo", "Se me chispotió", "Eso, eso, eso, eso", "Es que no me tienen paciencia" , "¿Y yo qué dije? ¿Y cómo es?", "¡Ahora sí te descalabro los cachetes!", "Vámonos tesoro, no te juntes con esa chusma", "¡Cállate, cállate, cállate que me desespeeeeras!", "Fíjate, fíjate, fíjate", "Y ahora, ¿Quién podrá defenderme?", son algunas de las ocurrencias que dia a día, en boca del Chavo u otros personajes, provocaron una sonrisa en grandes y chicos.
El Chapulín Colorado, el profesor Chapatín, Chaparrón Bonaparte, nacieron de la inventiva de un hombre pequeño de estatura pero enorme de talento.
Este actor, comediante, dramaturgo, escritor, guionista, compositor, director y productor de televisión mexicano fue un idolo en su país y en todo el continente de habla hispana.
Hizo reir y emocionar con la sencillez de personajes cercanos, nobles, bienintencionados.
“Se fue el mejor escritor de comedias de toda la historia de México”, acaba de decir Rubén Aguirre, el recordado profesor Jirafales.
Como suele decirse, algunas personas no se pueden ir del todo. Siguen estando a través de su obra. Y la obra de RobertoGómez Bolaños atraviesa generaciones y seguirá sorprendiendo con una forma de humor que no envejece ni tiene fecha de vencimiento.
Un hombre de convicciones, a favor de la vida
En abril de 2007, Chespirito se unió al reclamo de grupos católicos y conservadores que querían evitar que se despenalce el aborto en el Distrito Federal, frente a la postura de la Asamblea Legislativa.
Los legisladores finalmente despenalizaron el aborto hasta las 12 primeras semanas de gestación de un ser humano.
Roberto Gómez Bolaños apareció en spots televisivos en contra de la nueva ley.