Como parte de los preparativos del festival musical Lollapalooza, la Municipalidad de San Isidro comenzó a realizar evaluaciones de impacto acústico para garantizar que el ruido no exceda los límites permitidos. Las mediciones se desarrollaron en 6 puntos periféricos al Hipódromo y continuarán el viernes y sábado.
"Hace tiempo que comenzamos a trabajar para fijar las pautas y normativas que se le exigen a la empresa que organiza el Lollapalooza. Como parte de ello, estamos haciendo las mediciones de ruido, para que ninguno de los valores supere lo que se denomina como ruido molesto. Y en caso de que esto suceda, nos contactaremos con los organizadores para que reduzcan el volumen para estar dentro de los parámetros que indica la normativa", señaló el director General de Gestión Ambiental, Seguridad y Habilitaciones Industriales de San Isidro, Ricardo Antoniassi.
Las mediciones se realizan en base a la Norma IRAM 4062, referida a ruidos que superan la normal tolerancia. Las pruebas se realizaron en Santa Fe y Laprida; Santa Fé y Andrade; Guido Spano y Coronado; Dardo Rocha y Monteagudo; Saavedra y Entre Ríos; Bernabé Márquez y Tellier (de acuerdo a la dirección de las cajas acústicas ubicadas en los escenarios del predio)
"El equipo de evaluación mide decibeles (dB), que integra el nivel ruido de la zona en 5 minutos. Para ello, tiene en cuenta el resultado de ruido de fondo; ya sea el correspondiente al tránsito vehicular, tren, actividad normal o una conversación. Se hace los mismos días del Lollapalooza, (viernes, sábado y domingo), y luego, se comparan durante el evento musical. Esos resultados deben ser igual o no superior a los 8 decibeles que indicaron los controles", explicó el Lic. en Seguridad e Higiene laboral, José Arroyo.