En Puerto Libre [Sebastián Elcano 2340, Martínez] el frío no parece ser un problema. No hace falta gran cantidad de abrigo o vivir pegado a una estufa para combatirlo sino mucho movimiento. Así lo demuestran los alumnos de las clases de ritmo caribeño, otra de las propuestas gratuitas del programa Juventud Prolongada que la municipalidad de San Isidro lleva adelante para la tercera edad.
"Durante las tres clases que tenemos a la semana, tratamos de hacer un paso por todos los ritmos caribeños, por ejemplo, cha cha cha, merengue y salsa. Todo adaptado a la tercera edad", expresó el profesor Inocente Pedroso mientras bailaba.
Si bien la música baña de calidez al salón y despierta las ganas de bailar en cualquiera que la escuche, lo que verdaderamente completa el clima son las risas y alegría de cada uno de los abuelos.
"Esto es salsaterapia. Funciona para comunicarse, canalizar inquietudes y al mismo tiempo proyectar energía positiva. Además, sin darse cuenta, cada uno mejora sus articulaciones y su coordinación", agregó Pedroso.
Mientras tomaba un descanso, Jorge Sarranz, expresó: "La clase es fabulosa. Puerto Libre es un lugar muy especial, pienso que no hay ni siquiera en todo el mundo un espacio para los jubilados como este".
Francisco Maschiotta, de Boulogne, sumó con una felicidad imborrable que Puerto Libre era el mejor lugar en San isidro y en el mundo.
Marta Tardelo, de Martínez, dijo "Esto es un lugar maravilloso, yo con mi edad y físico hago árabe, yoga, folklore, de todo. La verdad que se me van todos los dolores y comparto buenos momentos con amigos. Mejor, imposible".