El consumo de tabaco aumenta las posibilidades de cáncer en cualquier parte del cuerpo
Aunque todos suelen asociar el consumo de tabaco con cáncer de pulmón (el de mayor incidencia en hombres), la realidad es que fumar potencia los cánceres en general: mama, páncreas, hígado, estómago, cuello uterino, intestinos, etc.
El consumo de tabaco está consolidado en las clases menos favorecidas económica y culturalmente. Mientras las personas de niveles socioeconómicos más altos descubrieron hace tiempo la cultura del cuidado del cuerpo, en las bajas el consumo de cigarrillos permanece.
NÚMEROS:
Un 27% de la población mundial fuma.
1 billón de hombres y 250 millones de mujeres fuman diariamente.
La edad promedio del consumidor de tabaco es 41 años.
El 82% de los fumadores vive en países de bajos y medianos ingresos.
El consumo de tabaco es la principal causa de muertes evitables, con un número estimado de 6.000.000 de muertes anuales en el mundo.
Junto con los grupos de menores ingresos, los jóvenes (personas deentre 15 y 44 años) son los más afectados por la pandemia de tabaco.
Las mujeres y los hombres de clase baja fuman 1 vez y media más que los hombres de clase alta.
El 10,7% de los gastos familiares es lo que se destina a la compra de tabaco en los hogares de bajos ingresos.
Las muchas y serias consecuencias en la salud de los fumadores son afrontadas por la salud pública, es decir con los recursos de toda la población.
Si se quiere reducir el riesgo de tener cáncer, además de otras acciones concretas, HAY QUE DEJAR DE FUMAR Y DESALENTAR EL INICIO EN EL CONSUMO (no sólo de tabaco, sino también de marihuana).