La Municipalidad de San Isidro está incorporando cabinas sanitizantes en los accesos a las terapias en los hospitales, en donde se encuentran pacientes con COVID-19.
Cuando el profesional de la salud pasa por esta cámara, como si fuera una ducha, se activa desde el techo una pulverización que tiene mezcla de cloruro de benzalconio y luz ultravioleta que desactivan cualquier resto de partícula de coronavirus que pudiera haber quedado en la ropa.
Se trata de una tecnología que esteriliza ropa, cabello y calzado en los agentes de salud.
"Es una herramienta más para evitar el contagio y la circulación comunitaria del virus", explicó el intendente de San Isidro, Gustavo Posse.
En el 2º piso del Hospital Central confluyen las terapias intensivas, intermedias y sala mix, donde se encuentran pacientes portadores de Covid-19 o casos sospechosos. Allí se ubicó la primera cabina como prueba piloto.
"Es un extra de protección para el personal de salud que sale de ese sector. Se trata de una prueba piloto; las próximas tendrán otras medidas como para que pueda acceder una camilla, por ejemplo", explicó el secretario de Salud Pública, Dr. Juan Viaggio.