Entre los virus más comunes se encuentran los responsables de enfermedades infecciosas como los resfríos, dolores de garganta, tos, vómitos y diarrea.
Por eso es fundamental el lavado de manos, antes y después de comer, además de ponerse el codo delante de la boca si se va a estornudar.
Los resfríos llegan por un virus que se contagia a través de la tos o estornudos y puede permanecer entre 6 y 8 horas en objetos, picaportes, teclados y cuadernos, entre otros.
Los gérmenes que contaminan las manos son los mayores causantes de estas enfermedades y también de otras mucho más graves, como la Hepatitis A.
Procedimiento para un correcto lavado de manos:
Mojar abundantemente las manos.
Aplicar jabón y refregar las manos durante 20 segundos.
Utilizar agua para retirar el jabón.
Secar las manos con toallas de papel Y LUEGO CERRAR LA CANILLA CON ESA TOALLA. (La canilla y el botón del depósito del baño están llenas de gérmenes habitualmente)
Tirar las toallas descartables en el cesto de basura.
Complementar el lavado con alcohol en gel o spray.
Tos:
Cubrirse la nariz y la boca con un pañuelo descartable al toser o estornudar.
Usar el cesto de basura más cercano para desechar los pañuelos utilizados y nunca reutilizar o guardar el pañuelo.
Lavarse las manos.
Mantener los escritorios de las escuelas y los lugares de trabajo limpios y desinfectados.
Lavarse las manos antes de:
Tocar a un bebé
Tocar los alimentos
Comer algo rápido en la escuela o en otro lugar
Tocarse los ojos, nariz o la boca
Visitar a alguien enfermo
Preparar comidas o biberón
Lavarse las manos después de:
Sonarse la nariz, estornudar, toser o tocarse los ojos
Ir al baño
Tocar la basura, animales o manipular sus excrementos
Jugar en el patio o en la plaza o luego de hacer deportes
Cambiar los pañales de un bebe
Viajar en transporte público o asistir a lugares como hospitales, escuelas, canchas, clubes, etc