El viernes 14 de Octubre se celebrará nuevamente el Día Mundial del Huevo, como epílogo de la Semana Mundial del Huevo que este año comenzará el lunes 10.
Desde 1996, la Comisión Internacional del Huevo organiza esta celebración que ha crecido año a año en diversidad de eventos alrededor del mundo con festivales, concursos de cocina, ediciones de libros y revistas, jornadas infantiles, campañas publicitarias y encuentros gastronómicos como la Quinta Semana Gourmet del Huevo.
Nuevos estudios del USDA (Departamento de Agricultura de los Estados Unidos) sobre la composición del huevo demuestran que aporta un 64% más de vitamina D, indispensable para la absorción del calcio en el cuerpo humano, y 14% menos de colesterol. El USDA ha analizado recientemente la composición de los nutrientes del huevo en una muestra aleatoria de diferentes estados del país y los resultados muestran que la cantidad promedio de vitamina D en un huevo grande es de 41 UI de vitamina D, un aumento del 64% respecto a los 18 UI de mediciones pasadas, y de 185 mg de colesterol, una disminución del 14% respecto a los 215 mg históricos.
El huevo es uno de los pocos alimentos que son fuente natural de vitamina D, lo que significa que un huevo aporta al menos el 10 por ciento de la cantidad diaria recomendada (RDA). La vitamina D desempeña un papel importante en la salud contribuyendo en el metabolismo de la absorción de calcio, ayudando de esta manera a formar y mantener los huesos fuertes, disminuyendo el riesgo de enfermedades óseas tales como la osteopenia u osteoporosis. Más de 40 años de investigación han demostrado que los adultos sanos pueden comer huevo sin afectar significativamente el riesgo de enfermedades del corazón y que el mayor responsable del aumento de colesterol en sangre son las grasas saturadas y no el colesterol de los alimentos. Por todos estos motivos, varias organizaciones internacionales de promoción de la salud –incluyendo las Guías Alimentarias para Estadounidenses, la Asociación Americana del Corazón, la Fundación del Corazón de Canadá, Australia e Irlanda– promueven al huevo como parte de una dieta saludable para el corazón, reconociendo además la importante contribución nutricional del resto de sus nutrientes.
La Comisión Internacional del Huevo representa a los productores de huevos en el ámbito internacional y colabora activamente con la FAO, desarrollando una importante campaña de donación de 50 millones de huevos para paliar la malnutrición en las poblaciones más necesitadas del planeta. Gracias al generoso aporte de los representantes del sector, miles de personas carenciadas alrededor del mundo hoy tienen acceso a esta excelente fuente de proteína de alta calidad, una cualidad que destacan nutricionistas de todos los países respecto al HUEVO. En consonancia con esta política mundial, CAPIA (Cámara Argentina de Productores Avícolas) extiende su compromiso solidario, continuando por quinto año consecutivo su donación a la Fundación Margarita Barrientos, y continua trabajando junto con la RED ARGENTINA DE BANCOS DE ALIMENTOS, asociación civil sin fines de lucro integrada por los 14 bancos de alimentos del país (Buenos Aires, La Plata, Mar del Plata, Tandil, Córdoba, Goya y Ombú (Virasoro, Corrientes), Mendoza y Valle de Uco (Mendoza), Neuquén, Salta, Jujuy y Tucumán), donando durante el último año 1.000.000 de huevos, con el objetivo de mejorar la calidad nutricional de las comidas que reciben más de 155.000 personas.
Lo que es importante saber del huevo:
Los huevos no aportan carbohidratos ni gluten ni lactosa, lo que lo convierte en un alimento "comodín" tanto para diabéticos, celíacos y alérgicos a la lactosa.
A nivel calórico, un huevo entero aporta aproximadamente sólo 75 calorías, como una fruta mediana.
Proteínas: la proteína del huevo es considerada como patrón de referencia para comparar nutricionalmente a las demás proteínas de los diferentes alimentos. Esto se debe a que es la de más alto valor biológico (contiene los 9 aminoácidos esenciales para el organismo) y que son proteínas libres de grasas, representando el 10% de las recomendaciones proteicas diarias para un adulto y el 30% para los niños.
Grasas: las grasas que predominan en el huevo son ácidos mono y poliinsaturados (principalmente ácido oleico - Omega 9), muy beneficiosos para el organismo. Su grasa es de fácil digestión. También están presentes la lecitina y los fosfolípidos.
Minerales: aporta hierro (9%), concentrado especialmente en la yema, selenio (28%), yodo (16%), fósforo (13% de las recomendaciones diarias), zinc (en la yema), potasio y magnesio.
Vitaminas: se considera al huevo una gran fuente de vitamina B12 (cobalamina), concentrada principalmente en la yema, B2 (riboflavina) (cada una aporta el 20% de la recomendaciones diarias) y B7(biotina) (que aporta el 33%). Así mismo nos aporta vitamina B1 (tiamina), niacina (vitamina B-3), ácido fólico, vitaminas A, D (el 12%) y E (en la yema). Es importante señalar que los huevos poseen colina (el 40%), muy conveniente para la alimentación de mujeres embarazadas, ya que facilita el correcto desarrollo del sistema nervioso central del embrión/feto, junto con el ácido fólico. Por otro lado los carotenoides, luteína y zeaxantina, ayudan a disminuir el riesgo de padecer trastornos oculares como las cataratas y la ceguera.
¿Cómo conservarlos adecuadamente y saber si están frescos?
Los huevos deben conservarse siempre entre 7 y 15ºC, y su duración es de aproximadamente 28 días desde la puesta. Se los considera extra frescos cuando se limita su plazo de consumo hasta 9 días.
Lo aconsejable es consumir sólo aquellos que estén con su cáscara bien limpia (sin materia fecal) y no rota. Se pueden cepillar antes de guardar y a la hora de prepararlos y consumirlos, no cascarlos en el mismo recipiente que se prepara la comida. También se pueden lavar, pero sólo el momento de consumirlos. También tenemos que tener en cuenta, cómo reconocer si están frescos o no. Para ello existen varios métodos:
Ya cocido y cortado de manera vertical, cuanto más centrada este la yema más fresco es el huevo, cuanto más de lado este menos fresco será.
Cuando se lo sumerge en agua y crudo (entero) si el huevo va hacia el fondo del recipiente, es que está fresco. Si queda de forma intermedia, puede que tenga ya una semana, pero si flota está poco fresco. Esto sucede porque su cámara de aire (espacio entre la cáscara y la clara, formada por membranas de protección) aumenta a medida que pasan los días, a más cámara de aire, el huevo flota y menos fresco es.
Cuando el huevo se parte en crudo, se considera que no es fresco cuando su clara es muy fluída, muy líquida y su yema está aplastada y poco consistente.
Diez razones para consumir huevo:
Es 100% natural y envasado en origen: es un alimento totalmente natural sin agregado de conservantes ni aditivos. Las proteínas son de alto valor biológico: sus proteínas son las de mejor calidad nutritiva y más alto valor biológico ya que aportan los 9 aminoácidos esenciales y son las que mejor aprovecha nuestro organismo, debido a estas razones la FAO (Food and Agriculture Organization) la ha tomado como la proteína de referencia para evaluar la calidad proteica de los demás alimentos. Contiene más del 10% de las recomendaciones diarias de proteínas: un huevo aporta 6.25 grs. de la mejor proteína. Las recomendaciones de proteína para un adulto sano son de 0.8 a 1gr /kg. de peso corporal. Aporta ácidos grasos insaturados: principalmente monoinsaturados llamado ácido graso oleico que tiene la propiedad de aumentar el colesterol bueno, es el ácido graso principal del famoso aceite de oliva. Sólo 75 calorías por unidad: por lo tanto puede ser incluído en regimenes de adelgazamiento ya que aporta las mismas calorías que una fruta mediana. Gran variedad de vitaminas y minerales: aporta todas las vitaminas y minerales a excepción de la vitamina C. También es fuente de sustancias esenciales como la colina y de carotenoides llamados luteína y zeaxantina. Aporte de sustancias antioxidantes: fuente de luteína y zeaxantina biodisponibles, son carotenoides que disminuyen las probabilidades de sufrir enfermedades de la visión. Su consumo es conveniente en todas las etapas de la vida: en niños, adultos, embarazadas y ancianos ya que el huevo nutre al niño, fortalece al adolescente, alimenta al adulto y favorece al anciano gracias a su inigualable aporte de nutrientes. En términos económicos es la mejor inversión en nutrición y sabor: debido a la calidad de sus proteínas y el valor económico del alimento ofrecen la mejor relación costo-beneficio. Es la opción más saludable, nutritiva, que da mayor saciedad en sólo 75 calorías, libre de gluten y lactosa, para comer entrecomidas.