Muchos de los afectados con psoriasis sufren problemas psicosociales y cardiovasculares
Además de alterar la piel, la psoriasis puede provocar otros problemas de salud. Por esto, en el Hospital Universitario Austral se conformó una Unidad de profesionales de disciplinas variadas, para abordar la enfermedad de modo integral. Es la primera y única de la Zona Norte del Gran Buenos Aires.
La psoriasis es una patología cutánea inmunológica, crónica y por el momento incurable, que, a diferencia de lo que puede suponerse, no solamente afecta la piel y las articulaciones. “Muchos de los afectados padecen alteraciones psicosociales y compromiso del aparato cardiovascular". explicó el Dr. César Lagodín, dermatólogo del Hospital Universitario Austral (HUA)-. Por esto, resulta necesario el trabajo en equipo, para brindarle al paciente una atención integral, sumando conocimientos de distintas especialidades”. En el HUA funciona una Unidad de Psoriasis, que hasta el momento es la primera y única de estas características en la Zona Norte bonaerense. Sus objetivos principales incluyen el diagnóstico de problemas reumatológicos y cardiovasculares que puedan afectar a las personas con la enfermedad.
“Además, esta Unidad –conformada por dermatólogos, reumatólogos, cardiólogos y especialistas en salud mental– apunta a mejorar la calidad de vida de los pacientes, brindándoles un espacio de contención y de conocimiento de la patología, pues estamos convencidos de que esto los ayuda a enfrentar mejor su problema”, añadió Lagodín.
Por otro lado, la Unidad se encuentra trabajando para elaborar estadísticas propias aunque, en líneas generales, se sabe que la psoriasis es una enfermedad que no distingue sexos ni edades (puede presentarse inclusive en niños y lactantes) y que afecta del 2 al 3% de la población.
Existen distintos tipos clínicos de psoriasis (en placas, invertida, en gotas, pustolosa, eritrodérmica, etc.), y además dentro de cada uno de ellos, los cuadros presentan diferente grado de severidad. “En la Unidad se atiende a todos los pacientes, ya sea que presenten un cuadro leve, moderado o severo. Esto dependerá de la edad de comienzo de la enfermedad, lo mismo que la posibilidad de desarrollar problemas derivados en las articulaciones, hipertensión arterial, obesidad, alteraciones de la glucemia o de los lípidos, predisposición a la ateromatosis en los vasos sanguíneos y depresión”, enumeró el Dr. Lagodín, recién llegado del III Congreso Internacional de Psoriasis celebrado en París, en el cual participaron médicos de todo el mundo dedicados al estudio y tratamiento de esta enfermedad.
La clave
La psoriasis es resultado de una alteración en el sistema inmunológico de una persona, caracterizado por un proceso inflamatorio. Puede asociarse, en algunos casos, a la predisposición genética y a ciertos factores ambientales como el estrés, medicamentos y ciertas infecciones, que hacen que se produzca la enfermedad en la piel y en las articulaciones.
Esta suma de factores, además, propicia el desarrollo de problemas metabólicos y del aparato cardiovascular. Finalmente, la psoriasis puede ir acompañada también de alternaciones emocionales, de allí la importancia de contar con el apoyo de profesionales de la salud mental a la hora de abordar el tratamiento de la enfermedad.